El Índice de Pobreza alcanzó al 39,2% al término del año pasado, por encima del 37,3% de igual período del 2021, informó este jueves el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).

Este aumento se dio a pesar de que la tasa de desocupación bajó del 7% a finales del 2021, al 6,3% en el 2022, lo que implica que cada vez hay más trabajadores pobres. Además, este incremento se produjo durante un año en el que la economía creció 5,1%, pero con una inflación del 94,8%. 

Con una población estimada en 46,2 millones de habitantes según el último Censo efectuado por el Indec, estas cifras implican que 18,1 millones de personas están por debajo de la línea de la pobreza, y dentro de ellos 3,7 millones, son indigentes, es decir, que su nivel de ingreso no les alcanza ni para comer. 

El índice de Indigencia se ubico en 8,1% entre julio y septiembre del año pasado, frente al 8,8 % de igual período del 2021. En tanto, el nivel de indigencia no tuvo mayores variantes ya que en el segundo semestre terminó en 8,1% frente al 8,2% del primero del 2022. Incluso, el 39,2% de nivel de pobreza del segundo semestre del 2022 estuvo por encima del 36,5% del enero-junio de ese año. 

A pesar de la caída de la desocupación, la pobreza aumentó al 39,2% en 2022

Entre julio y diciembre del año pasado hubo dos meses con inflación en torno al 7%, otros dos por encima del 6% y noviembre y diciembre alrededor del 5%. Ya hacia fines del año pasado, un informe realizado por el Observatorio del Derecho Social de la CTA- Autónoma dio cuenta que la mitad de los asalariados formales percibieron un ingreso menor a los $130.000, es decir, por debajo de la línea de pobreza. 

“El dato más impactante en materia salarial es la mediana. Los ingresos de la mitad de los asalariados registrados del sector privado fueron inferiores a $129.288 de bolsillo en noviembre. En el mismo mes la canasta básica total para un hogar de cuatro personas fue de $ 145.948″, destacó el informe. 

En tanto, desde el Observatorio Social de la Universidad Católica Argentina (UCA) un tercio de las personas que tiene empleo, ya sea registrado o no, es pobre. El ciclo de estancamiento económico iniciado en 2011 “provocó un incremento de la pobreza de ocupados, que llegó a 18,1%". "A partir de la crisis de 2018-2019, profundizada por la pandemia de covid-19, la pobreza de trabajadores se ha instalado en un nuevo nivel estructural: 29,8% en 2022”, destacó el informe. 

Para los especialistas los primeros datos de este año no son los más alentadores. El economista de la Universidad Torcuato di Tella, Martín González Rozada, dijo que “las perspectivas para el 2023 no son mejores” a las del final de 2022. “El Gobierno no logra controlar la inflación, y la canasta básica en el primer bimestre de 2023 está creciendo a un ritmo que ya supera largamente el 100% interanual”, agregó Rozada. 

Además, “la actividad económica ingresó en una fase de desaceleración en septiembre del año pasado que muy probablemente se transforme en recesión durante el primer trimestre del corriente año y los ingresos totales familiares no acompañan el crecimiento en la canasta básica”.