El conflicto gremial en la industria del neumático escaló fuerte en los últimos días, mientras que ya afecta a los tres grandes jugadores del mercado con consecuencias directas en la oferta y los precios. Las trabas a las importaciones, sumado a los problemas logísticos globales, también inciden en el mercado automotriz

El último caso fue el de Pirelli, que debió paralizar su producción en la planta de Merlo porque tiene su depósito colapsado con cerca de 50.000 neumáticos. Es que los trabajadores estuvieron bloqueando los ingresos de diferentes empresas, por lo que deciden quién ingresa y quién sale.

Esto se da en el marco de una escasez de oferta en el mercado y precios exorbitantes que “son una estafa”, tal como describió la semana pasada el dueño de Fate, Javier Madanes Quintanilla. El empresario sostuvo que faltan 1,3 millones de unidades en Argentina. 

Madanes Quintinilla explicó que, al estar produciendo muy por debajo de sus posibilidades, “hay desabastecimiento y los pocos que tienen venden carísimo remarcando dos o tres veces”. Según el titular de Fate, el precio de fábrica de los rodados más pequeños es del orden de los $17.000 o $18.000 mientras que al público llegan a entre $50.000 y $60.000.

En junio, un paro nacional dejó sin producción a las tres fábricas que hay en el país: Fate, Pirelli y Bridgestone. En la Argentina se producen unos 500.000 neumáticos por mes en condiciones habituales. Por eso Madanes calcula que el faltante es de entre 1,3 y 1,4 millón de unidades.

El conflicto entre los fabricantes de neumáticos y el sindicato que representa a los trabajadores se encuentra en una etapa crítica desde la semana pasada, luego de que fracasara la reunión en el Ministerio de Trabajo. Ante esta situación, integrantes del Sindicato Único de Trabajadores del Neumático Argentino (SUTNA) volvieron a bloquear los ingresos a las plantas.

El gremio rechazó la propuesta de un aumento del 16% en concepto de revisión del quinto tramo de ajuste salarial acordado por paritaria por el período 2021/2022 más un bono trimestral por un monto a definir sujeto a diferentes pautas. Con ese incremento, la mejora acumulada sería de 66%. También está en discusión cambios en el régimen de trabajo para los fines de semana, ya que la actividad está teniendo un pico de demanda.

Las tres empresas firmaron un comunicado señalando que, ante el nuevo rechazo gremial, quitaban el ofrecimiento del bono trimestral, se limitaban al ofrecimiento del reajuste del 16% y a comenzar a discutir la paritaria 2022/2023. El SUTNA comunicó a sus afiliados el rechazo a la propuesta empresaria y adelantó que el lunes próximo se realizaría una nueva reunión en el Ministerio.

Mientras, desde los concesionarios de autos reclaman por faltantes de autos importados, por lo que solo se están ofreciendo nacionales. Esto sucede, indican desde el sector, por las restricciones para importar que impuso el Gobierno a partir del año pasado y que se agravaron en julio.  

Si bien la demanda cayó por la incertidumbre sobre qué sucederá con la economía, la poca oferta presiona los precios al alza. Para septiembre se esperan listas con remarcaciones de hasta un 10%, en este contexto. 

Un informe de Fiel destacó que en julio pasado su índice de producción industrial marcó una caída del 2,9%, luego de un buen primer semestre en cuanto a niveles de actividad sectorial. Entre abril y mayo pasados la industria alcanzó el mayor nivel de producción en la recuperación iniciada en octubre de 2021. 

“Hacia agosto, los faltantes de partes y piezas en la industria automotriz a causa de los problemas logísticos globales y el acceso a las divisas, han derivado en nuevas paradas en algunas de las terminales, mientras que el conflicto en el sector de neumáticos continúa prolongándose. Para la actividad industrial en su conjunto se anticipa otra merma en la dinámica de la recuperación”, concluyó Fiel.