Argentina y Paraguay abandonan un acuerdo de 1973 y pagarán el mismo valor por la energía
Hasta ahora nuestro país abonaba U$S 50 por MWh y Paraguay 22 dólares por MWh. Desde ahora pagarán 28 las dos naciones. Los detalles de la decisión.
Los gobiernos de la Argentina y Paraguay dejaron atrás un convenio que habían firmado en 1973 y firmaron nuevo acuerdo por el cual se establece que los dos países pagarán el mismo valor por la energía que genera la represa binacional de Yaciretá.
El acuerdo original se había firmado en 1973 entre Juan Domingo Perón y Alfredo Stroessner. Ahora con este nuevo convenio, la Secretaría de Coordinación de Energía y Minería, la Administración Nacional de Electricidad de Paraguay (ANDE) y la Entidad Binacional Yacyretá (EBY) actualizaron las condiciones de utilización de la energía generada por la central hidroeléctrica binacional.
Ambos países acordaron pagar el mismo precio por la energía: 28 dólares por MWh. Hasta ahora, Paraguay abonaba 22 y Argentina cerca de 50. Con este nuevo esquema se eliminaron las compensaciones cruzadas entre partes, lo que generará un ahorro concreto para el Tesoro Nacional.
El Ministerio de Economía informó que este acuerdo permite dar previsibilidad en el uso de la energía generada por Yacyretá, fijar el mismo precio para ambos países, bajando el costo que venía pagando Argentina. De esta manera, la EBY podrá encarar su plan de inversiones sin aportes del Tesoro Nacional.
En este sentido, Paraguay se compromete a tomar 425 MWh medios del total de 3.100 MW de generación instalada de la central, lo que permitirá que Argentina acceda hasta al 85% de la energía disponible, siempre que el país vecino no la necesite. Esta disponibilidad extra es clave para reducir el costo durante los meses de invierno.
Este acuerdo también garantiza el flujo de fondos para que la Entidad Binacional Yacyretá pueda sostener sus gastos operativos y retomar inversiones con recursos propios, sin depender del Estado argentino. Entre esas inversiones se destaca la obra del brazo Aña Cuá, que permitirá aumentar un 10% la capacidad instalada de la central.
“El acuerdo muestra una decisión concreta de ordenar lo que estaba desordenado, establecer reglas claras y hacer más justa la relación entre ambos países”, señalaron desde el Gobierno argentino