El gobierno de Brasil redujo en un 10% las tasas del Impuesto de Importación sobre más de 6.000 rubros que forman parte del Arancel Externo Común (AEC) que utiliza en el comercio con países que no forman parte del Mercosur.

Según el Ministerio de Economía, “la medida apunta a minimizar los impactos derivados de la pandemia de la covid-19 y el conflicto en Ucrania sobre el costo de vida de la población y los precios de los insumos en el sector productivo”.

La inflación en Brasil alcanzó al 1,06% durante abril, por lo que acumuló un 4,29% en lo que va del año, y 12,13% en los últimos doce meses, según el oficial Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (Ibge).

Esta es la segunda oportunidad en la que el gobierno de Jair Bolsonaro reduce el AEC. La primera tuvo lugar en noviembre del año pasado, para casi el 90% de los bienes comercializados por el bloque. 

A pedido de Argentina, se excluyeron productos considerados sensibles para la industria del país, como automóviles, autopartes, lácteos, textiles, duraznos y juguetes. 

Ahora se incluyeron productos como frijoles, carnes, pastas, galletas, arroz, materiales de construcción, entre otros. Quedaron fuera artículos que se encuentran bajo regímenes de excepción en el Mercosur, como automóviles y bienes de capital.

La semana pasada, en una entrevista radial, el presidente Alberto Fernández se refirió al aumento del 73,4% del rubro “Prendas de vestir y calzado”, al asegurar que “Hay un desmadre de los precios, los protejo, no dejo entrar productos de China y los precios no paran de subir, se vuelven en contra de la gente”

Por su parte el presidente de Uruguay, Luis Lacalle Pou, defendió la intención de su país de reducir el AEC que tiene el Mercosur.

"Lo que le decimos a Argentina, lo que le decimos a Brasil es: 'entendemos que a veces tengas cierto proteccionismo', somos la quinta región más proteccionista del mundo, pero Uruguay tiene que romper ese amarre", dijo Lacalle Pou, durante acto realizado por el diario Clarín.