El ministro de Economía, Sergio Massa, mantuvo este viernes al mediodía su primer encuentro con la Mesa de Enlace. Al finalizar la reunión, los ruralistas adelantaron que tendrán más encuentros en las próximas semanas y que aún no habrá anuncios de nuevas medidas. 

La reunión se da en el marco de las necesidades de acumular divisas que tiene el Gobierno, el stock de granos sin liquidar que se estima en el orden de los US$ 14.000 millones y la posibilidad de dar un mayor incentivo al sector para sumar los “agrodólares” a las reservas del Banco Central. 

Finalmente, la reunión se produjo en Escobar y Massa estuvo acompañado por Juan José Bahillo, en la visita a la agrupación que integran Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), Coninagro, Federación Agraria Argentina (FAA) y Sociedad Rural Argentina (SRA)

Las conversaciones comenzaron este jueves, cuando los ruralistas fueron contactados por funcionarios que les comunicaron que habría una posibilidad de juntarse con el ministro de Economía. La confirmación llegó más tarde. En contraste, en el Palacio de Hacienda reina el hermetismo respecto a la reunión, en busca de no generar muchas expectativas y un raid mediático alrededor del cónclave con los dirigentes, algo que había sucedido el viernes pasado con otro encuentro que finalmente fue suspendido. 

En su primera conferencia de prensa, Massa se refirió a regímenes especiales para sectores que lideran las exportaciones, y por tanto el ingreso de dólares al país, como en el caso de la agroindustria. También sostuvo que entraría en 60 días US$ 5.000 millones de anticipo por exportaciones, aunque no hubo medidas de incentivo al sector, algo en lo que estaba trabajando el equipo del ministro.

Una de las posibilidades era extender el plazo previsto para el llamado “dólar soja” más allá del 31 de agosto con una mejora en las condiciones para tentar a productores y exportadores. El esquema contempla que, a partir de su liquidación, pueden poner el 70% de sus pesos en una cuenta atada al dólar link, para cubrir una devaluación, y el otro 30% pueden acceder al tipo de cambio solidario. Esos porcentajes podrían pasar a 60 y 40%, respectivamente.

En el Gobierno saben que en el corto plazo podrían ingresar US$ 2.500 millones solo por el complejo sojero. También contemplan que restan vender unos 22 millones de toneladas de la oleaginosa, por un valor de casi US$ 14.000 millones. Ahí es donde apunta Sergio Massa, porque podría incrementar sus reservas y despejar las expectativas de devaluación en los próximos meses.