Entre los trabajadores registrados en relación de dependencia, la modalidad ocupacional que mayor crecimiento experimentó entre 2015 y 2021 fue el empleo público, con 261.000 trabajadores adicionales, destacó un informe elaborado por el IERAL. 

La casa de estudios económicos de la Fundación Mediterránea destacó que en igual período “se perdieron (entre alzas y bajas) alrededor de 347.000 puestos asalariados en el sector privado”, reflejando quienes han sido los más afectados por las crisis ocurridas entre 2018 y el 2020. 

Desde el 2015, se crearon 261.000 empleos públicos y se perdieron 347.000 privados

Además del empleo público, en los dos años del actual gobierno de Alberto Fernández “se computó un importante aumento del cuentapropismo, de la mano de trabajadores enrolados en el monotributo y monotributo social, sumando en promedio más de 100.000 personas a estas categorías”. 

Sin embargo, se contabilizan 25.000 autónomos menos, es decir, trabajadores con mayores ingresos, que en el 2015. 

El IERAL, en base a datos oficiales del INDEC y el Ministerio de Trabajo, dio cuenta también que “en el plano salarial, el poder adquisitivo de los trabajadores registrados presenta una tendencia descendente desde 2017, con estancamiento y fluctuaciones en los últimos dos años”. 

En este marco “el salario real cayó 12,2% entre septiembre 2015 y el mismo mes de 2021”, si bien se observó una recuperación del 4% en los últimos meses de este año. 

Desde el 2015, se crearon 261.000 empleos públicos y se perdieron 347.000 privados

El deterioro en el empleo y en los salarios “resulta en crecientes números de pobreza. En el primer semestre 2021, la incidencia de la pobreza fue del 40,6% de la población (18,6 millones de personas), con un incremento de 6,4 millones de personas respecto de 2015”. 

Al mismo tiempo, la tasa de indigencia, entendida esta como la gente cuyos ingresos no alcanzan ni siquiera para comprarse un mínimo de comida “se duplicó con relación al primer semestre de 2015” al alcanzar el 10,7%. 

El Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) informó que al término del segundo trimestre de este año el 70% de la población ocupada recibía una remuneración menor a los $ 50.000 mensuales. 

Si se toma por “hogares” el 70 % de estas unidades ganaban menos de $ 93.000, ya sea por ingresos salariales, pensiones, o ayudas sociales.