El Banco Mundial (BM) redujo la proyección de crecimiento prevista para la Argentina para 2023, del 2% inicial al 0%, debido a la falta de estabilidad macroeconómica, lo que se vio agravado por la fuerte sequía que afecta al sector agropecuario, y la suba de tasas a nivel internacional.

El organismo dio a conocer hoy sus proyecciones tanto para el país, como para la región, antes de la Reunión de Primavera (del hemisferio norte) que realizará junto al Fondo Monetario Internacional (FMI) entre el 10 y el 14 de abril en Washington.

Las nuevas proyecciones para este año, que significan una reducción de dos puntos porcentuales respecto de la última estimación, realizadas hace seis meses, fueron dadas a conocer por el economista jefe para América Latina y el Caribe, William Maloney.

A través de una conferencia de prensa virtual, Maloney presentó el informe económico del Banco Mundial "El potencial de la integración - oportunidades en una economía global cambiante", que examina las perspectivas de crecimiento de la región y los retos a los que se enfrenta en el corto plazo.

En cuanto a las perspectivas de crecimiento para Argentina, Maloney expresó que la nueva proyección del organismo para este año es de 0%, y "luego en 2024 volvería a crecer un 2%". El funcionario explicó que "claramente Argentina tiene muchas cuestiones por resolver", en el plano macroeconómico, a lo que se le agregó la fuerte sequía, lo que “refleja la necesidad de mitigar las altas temperaturas, que tienen un efecto sobre el crecimiento de países como la Argentina”. 

En este sentido agregó que, para aumentar la inversión, "la estabilidad macroecónomica es un requisito para que fluyan capitales a la región, no solo capital del exterior sino que la actividad comercial sea posible para los locales", expresó.

Con respecto a la inflación, que las consultoras privadas estiman en 100% para este año, Maloney solo se limitó a señalar que "apoyamos el programa con el FMI en este punto y esperamos que se pueda garantizar una macroestabilidad".

En cuanto a la región, la entidad estimó que la economía de Chile registrará una caída de 0,7%; mientras que Brasil crecerá 0,8%, México, 1,5%; Uruguay, 1,8%; y Paraguay, 4,8%, entre otros países de la región. Maloney subrayó que América latina es la que “menos ha crecido desde el 2019 en adelante".

En base a esta previsión, en 2023 la región crecería 1,4%; y 2,4% en 2024 y 2025. En este sentido, sugirió a los países de la región deben “aprovechar la tendencia verde, con productos elaborados de manera sustentable porque vamos a ser un exportador de energía verde como hidrógeno y litio”.