El Consejo Federal del Trabajo, integrado por los ministros provinciales, ratificará en breve la resolución conjunta 4/2021, que lleva la firma del ministro de Trabajo, Claudio Moroni, y la ministra de Salud, Carla Vizzotti, y que establece que los empleados vacunados deberán volver a sus puestos presenciales según los requieran, afirmaron fuentes de la cartera laboral a Data Clave.

No será una nueva normativa emanada desde el Ministerio, sino un refuerzo desde el Consejo que hará foco en la “buena fe” tanto de los empleados como de los trabajadores a la hora de utilizar los mecanismo habilitados por ley. Además, incentivará a la vacunación.

Con la campaña de vacunación en curso y con gran parte de las personas de riesgo vacunadas, esta resolución del 8 de abril de 2021 estableció que los empleadores y las empleadoras podían convocar al “retorno a la actividad laboral presencial” a los trabajadores que hayan estado de licencia por estar incluidos dentro de los grupos de riesgo “que hubieren recibido al menos la primera dosis de cualquiera de las vacunas destinadas a generar inmunidad adquirida contra el COVID-19 autorizadas para su uso en la República Argentina, independientemente de la edad y la condición de riesgo, transcurridos CATORCE (14) días de la inoculación”.

En tanto, para los de “alto riesgo” podrán ser convocados a los “CATORCE (14) días de haber completado el esquema de vacunación en su totalidad, independientemente de la edad y la condición de riesgo”.

Desde los gobiernos provinciales harán foco en el artículo 4 que destaca la actuación de “buena fe”. “Los trabajadores y las trabajadoras comprendidos en los artículos 1° y 2° de la presente medida que tengan la posibilidad de acceder a la vacunación y opten por no vacunarse, deberán actuar de buena fe y llevar a cabo todo lo que esté a su alcance para paliar los perjuicios que su decisión pudieren originar a los empleadores o empleadoras”, dice la normativa.

Lo cierto es que existe cierta presión desde los sectores empresariales para que se haga algo con las personas que se niegan a vacunarse, habiendo dosis disponibles, pero por otro lado tampoco quieren retornar a sus puestos, lo cual genera un perjuicio económico a las empresas.

Esto no fomentará ni habilitará los despidos ni irá en contra de los trabajadores, sino que apunta a incentivar la vacunación para que los empleados retornen a los puestos de trabajo y no pongan en riesgo a sus compañeros, pero que tampoco perjudique a las empresas.

Cabe resaltar que sigue vigente la ley de doble indemnización y la prohibición de despidos.