La vocera del Fondo Monetario Internacional (FMI), Julie Kozack, se limitó este jueves a afirmar que tanto los técnicos de Argentina como los de esa entidad “están trabajando muchísimo” para alcanzar un nuevo acuerdo, que para el país supone mantener una meta de déficit fiscal de 2,5% del PBI y que se le adelante US$ 10.000 millones, para, entre otras cosas, intervenir en el mercado de cambios.

“Los equipos trabajan constructivamente. Vamos a comunicarles cuando haya más detalles”, dijo Kozack, analizando cada palabra a la hora de hablar durante una conferencia de prensa que se realizó en Washington, pero de la que participaron medios argentinos vía internet.

Lo cierto es que desde mayo que el Gobierno argentino viene reclamando un cambio en las condiciones del Acuerdo de Facilidades Extendidas alcanzado con el FMI en marzo del 2022, entre los que se destacan mantener en 2,5% el nivel de déficit fiscal del PBI para este año, en lugar de reducirlo a 1,9%; y que el organismo le adelante desembolsos por US$ 10.000 millones, no solo para pagar los US$ 2.900 millones que vencen entre el 20 y 21 de este mes, sino también para intervenir en el mercado de cambio.

Este pedido se debe a que Argentina perdió casi US$ 18.000 millones de ingresos por la sequía a las exportaciones agrícolas, pero desde el Fondo apuntan en que en los dos años anteriores, el campo aportó uS$ 400.000 millones adicionales a la media histórica, y el Gobierno no supo quedarse con nada de ese excedente.

“Quiero decir que los equipos han estado trabajando muchísimo; la situación económica es muy difícil y ha sido exacerbada por la sequía histórica; el 25 de marzo se completó la cuarta revisión del programa de servicio ampliado con un desembolso de US$ 5.400 millones que se aprobó en el directorio”, recordó, a manera de “pase de factura”, dijo Kozack.

“Trabajamos muy de cerca con las autoridades argentinas para abordar esta situación compleja”, agregó.

En el Palacio de Hacienda se sabe que no habrá misión oficial hasta que las partes no se acerquen a un acuerdo y que el ministro de Economía, Sergio Massa, viajará a Washington entre el 20 y 21 de este mes, cuando vencen los US$ 2.900 millones.

Kocack apuntó a que el centro de las negociaciones “es ver las alternativas para reconocer el impacto de la sequía, mejorar la sustentabilidad fiscal y fortalecer las reservas, que son esenciales para reducir la inflación y proteger a los más vulnerables en la sociedad que suelen ser los más afectados, entre otros ejes”.

También destacó el canje de deuda interna que se realiza hoy al afirmar que “celebramos los esfuerzos de las autoridades para reducir los riesgos de renovación” de esas obligaciones “y al mismo tiempo asegurando que estas operaciones, protejan la sustentabilidad y no contribuya a vulnerabilidades (en el pago de estos compromisos) en el futuro”.