El Gobierno confía en que las metas del tercer trimestre con el FMI fueron cumplidas, por lo que esperan un desembolso de US$ 3.900 millones antes de fin de año. Una misión técnica del Ministerio de Economía viajará a Washington la semana que viene para terminar de cerrar la evaluación del organismo, pero también para avanzar en conversaciones sobre los exigentes objetivos de 2023 y la posibilidad de contemplar el “costo de la guerra”. 

El Gobierno "está cumpliendo las metas" del acuerdo con el Fondo y cada vez que hubo una evaluación por parte del organismo multilateral de crédito "se pasó sin mayores inconvenientes", dijo hoy la portavoz de Presidencia, Gabriela Cerrruti.

De hecho, según el monitor de metas con el FMI que realiza la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires el criterio de desempeño nominal del rojo primario para el tercer trimestre se ubicó en $1.142.000 millones, es decir 1,3% del PBI, mientras que Argentina llegó a ese período con $1.096.052 millones y un margen positivo de $45.948 millones. Allí jugó un papel fundamental el ingreso de retenciones por la implementación del “dólar soja”

En cuanto a la emisión monetaria, el objetivo era $665.400 millones y terminó efectivamente en $620.051 millones. “Se alcanzó un margen de $45.349 millones, 7% por debajo del máximo propuesto”, señaló la UBA.

Respecto al objetivo de reservas, la meta del tercer trimestre implicaba una acumulación de US$ 3.600 millones, modificada en el marco del contexto internacional y los efectos de la guerra en Ucrania. El beneficio al complejo sojero permitió sumar a las arcas del BCRA US$ 4.627 millones, aunque el país tuvo que pedir un waiver por la aplicación de tipos de cambios múltiples, ya que van contra la política del organismo.

Si las metas del 2022 son exigentes, el Ministerio de Economía mira con preocupación la del 2023, cuando el ajuste debe alcanzar para un déficit fiscal acumulado de 1,9% del PBI. El propio viceministro de Massa, Gabriel Rubinstein, reconoció que por “triquiñuelas contables” el rojo de este año será 2,8% del PBI por lo que la baja deberá ser de  casi 1 punto. 

Es por esto que Massa busca poner los “costos de la guerra” en Ucrania sobre la mesa y discutir con el organismo condiciones más favorables para Argentina, a través de flexibilizar metas, reducir sobre tasas y/o envíos de DEGs. El trabajo realizado por los funcionarios del Palacio de Hacienda refleja que el conflicto bélico en el este de Europa tuvo un costo de casi US$ 5.000 millones en la balanza comercial y de $590.000 millones en subsidios que debió pagar la Administración Pública.