La tasa de desocupación alcanzó a finales del 2020 al 11%, por encima del 8,9% con que terminó el 2019, en un año signado por la cuarentena para combatir el Covid 19 informó hoy el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC).

El Gran Buenos Aires encabeza la nómina de la desocupación con un índice del 14,1%; seguida por Rosario con 13,6%; Córdoba 13%; Ushuaia-Rio Gran 12,8%;  Santa Rosa 11,2%; Mar del Plata 11,1%; Mendoza 10,6%, informó el organismo.

En un 2020 signado por la cuarentena, la desocupación subió al 11%

Como era previsible, las restricciones impuestas para combatir el Covid 19, generaron una caída del 9,9 % de la actividad económica lo que indujo este aumento de la desocupación, según datos del propio Indec. Incluso, los “ocupados ausentes” que a finales del 2019 eran el 2,5% de los empleados treparon al 6,3% para octubre-diciembre del 2020. Además, los "ocupados con trabajo" desde la vivienda pasaron del 5,8% a finales del 2019, al 20,2% en el cierre del año pasado, debido al Teletrabajo que impulsó la pandemia.

En un 2020 signado por la cuarentena, la desocupación subió al 11%

Sin embargo, en el último cuatrimestre del año, cuando se liberó la actividad para la construcción y otros sectores de la economía, la tasa de desocupación bajó al 11% desde el 11,7% registrada en el tercer trimestre del año, a pesar de un crecimiento del 4,5% del Producto Bruto Interno entre ambas mediciones. Esta escasa reducción del índice de desocupación a pesar de ese crecimiento económico, juntos con otros indicadores, hacen que los economistas se vean remisos a señalar que el aumento de la actividad para este año reduzca drásticamente el desempleo.

Un informe de la consultora privada Abeceb, afirmó que "la cuarentena más extensa del mundo" implicó que, al tercer trimestre se perdieran el doble de horas trabajadas que en el resto del mundo. Esto es una caída interanual de 20% en la Argentina, contra un 10% en el mundo, según datos de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).

En base a esos números, los analistas de la consultora estimaron que el principal riesgo es que 2021 se convierta en un año de rebote económico sin empleo. "Si avanza la normalización en las horas trabajadas, entonces la economía podría crecer entre un 3,6% y un 5,3% en el año sin generar ningún puesto de trabajo”, calcularon.

En el mismo sentido, el economista Ariel Cronemberg sostuvo que “de ninguna manera va haber más empleo formal”, este año, debido a las leyes laborales, aunque “por ahí puede haber más empleo informal”.

“Las restricciones a las importaciones hacen que no se consigan los insumos para poder producir más, existe capacidad instalada sin utilizar, y leyes laborales poco flexibles, por lo que la creación de empleo formal es muy difícil”, dijo Cronemberg en declaraciones a Data Clave. Más allá de las perspectivas, el Indec dio cuanta también de un aumento en el índice de desocupados demandantes, que llegó al 10,3% en el cuarto trimestre del 2020, por encima del 8,1% del tercer trimestre, y del 9,5% octubre-diciembre del 2019.

Del total de los desocupados, el 29% son varones de hasta 29 años, y el otro 25,4% son mujeres de hasta esa edad. Además, el 45,8 % de los desocupados no terminaron la secundaria y el 82% ya tuvo un trabajo con anterioridad.