Terminó el mandato de Miguel Acevedo al frente de la Unión Industrial Argentina (UIA) y antes de fin de mes, las distintas facciones en pugna comenzaron a tejer el juego de alianzas para ocupar la presidencia del edificio de Avenida de Mayo al 1100. 

Dos candidatos sobresalen del resto. Por un lado está el abogado de la Coordinadora de Productores de Alimentos (Copal) y vice primero de la entidad, Daniel Funes de Rioja, y por el otro el dueño de Sinteplast, Miguel Ángel Rodríguez, ambos con distintos perfiles. 

Funes de Rioja es un director de empresas, un profesional, y un fuerte defensor de políticas liberales, en coincidencia con quienes representa, las empresas de la industria de la alimentación, quienes poseen ventajas competitivas contra cualquiera del resto del mundo. 

Por su parte Rodríguez es un hombre “que tiene fierros”, comenzó su empresa “desde la nada”, y representa a las pequeñas y grandes empresas, principalmente de la provincia de Buenos Aires, y acceso al Ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas. 

Una muestra de ellos fue el acto del Día de la Industria en septiembre del año pasado, cuando el propio presidente Alberto Fernández junto a todo su gabinete, y el gobernador Axel Kicillof, llegaron a la fábrica de pinturas, donde el mandatario aseguró que “es imposible pensar en un capitalismo sin una industria floreciente, pujante, que invierta a riesgo y dé trabajo". 

Pero las conversaciones en el edificio de Avenida de Mayo apuntan a que ahora es el tiempo de ser “críticos” ante los “avances” que del Gobierno como el Sistema Informativo para la Implementación de Políticas de Reactivación Económica (Sipre), un régimen obligatorio y confidencial con el que la Secretaría de Comercio Interior buscará tener un monitoreo de lo que ocurre en las cadenas de valor claves. 

Las firmas que se nieguen a brindar esa información podrán ser apercibidas en el marco de la ley de Abastecimiento, aclararon en el Ministerio de Desarrollo Productivo. 

En ese marco, el jueves quedó claro que Funes de Rioja está más cerca de la presidencia. La UIA a través de un documento de 17 páginas, la UIA criticó los cambios en la alícuota para las sociedades  Entre los principales problemas destacó “la presión tributaria elevada para quienes trabajan en la legalidad, que en Argentina supera el 40%, sumado a una alícuota a la reinversión de utilidades del 30%, que contrasta con niveles de 25% en el resto de la región”. 

Ese documento “tuvo consenso, pero está claro que fue el sector de las grandes empresas, las que apoyan a Funes de Rioja, las que lo impulsaron" , dijo un directivo consultado por Data Clave. La fuente explicó que “no hay contradicciones cuando te tocan tu bolsillo, pero lo cierto es que todos ven en Funes de Rioja una persona con más experiencia y diálogo, y eso definirá la balanza”. 

En este marco, y con el telón de fondo de la disputa entre el ministro de Economía, Martín Guzmán, y el subsecretario de Energía eléctrica, Federico Basualdo, la próxima reunión de la comisión directiva, prevista para el martes, será el preludio del ascenso del hombre de la Copal a la presidencia.