El Ministro de Economía, Martín Guzmán, comenzó el lunes su gira por cuatro países de Europa tendiente a conseguir mayores inversiones para el país, y postergar el pago de US$ 2.500 millones que Argentina le debe al Club de París, y que vencen en mayo. 

La gira de Guzmán se produce en momentos en que el Gobierno busca ampliar de 10 a 20 años el plazo para repagar su deuda de US$ 45.000 millones con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el pedido de las empresas europeas para que les permitan una mayor cantidad de importaciones a sus empresas radicadas en el país, y el giro de utilidades, 

Todos estos temas estuvieron sobre la mesa este lunes cuando Guzmán se reunió en Berlín con su par de economía alemán, Peter Altmaier, el vice canciller, Olaf Scholz, y el secretario de Finanzas, Wolfgang Schmidt. Cabe recordar que Alemania es el principal acreedor, con más del 37% de la deuda que la Argentina mantiene con el Club de acreedores.

Lo cierto es que Guzmán busca el apoyo de Alemania, uno de los principales socios del Club de París, para que se reprograma el pago, y a la vez sumar adhesiones a su plan para que el FMI le otorgue a Argentina un plan de pagos a 20 años, en lugar de los 10 años máximo que rigen hasta ahora en el organismo. 

A cambio, Argentina lleva la promesa de cumplir con los planes de fomento en el sector petrolero y automotriz, permitir mayor cantidad de importaciones de insumos a las empresas europeas, y ampliar el giro de utilidades. 

Estos dos últimos puntos son cruciales ya que a comienzos de mes, la Eurocámara, que agrupa a más de 2.200 compañías privadas de ese origen en el país, le reclamó al ministro de Desarrollo productivo, Matías Kulfas, que le permitan comprar dólares para importar, que no se frenen esos envíos en la Aduana, y la posibilidad de enviar dividendos a sus casas matrices. 

Este martes viaja a Italia donde se encontrará con su par Daniele Franco. Acá toma cuerpo el tema sobre la suerte de Edesur, propiedad de la italiana Enel, que criticó duramente el congelamiento de tarifas y las críticas que amenazan con quitarle la concesión del servicio. 

Claro que ese no es el único negocio del “Ente nazionale per l'energia elettrica”, en el país también participan en generación termoeléctrica como la Central Costanera y parte de Dock Sud, la hidroeléctrica El Chocón, en transporte eléctrico mediante la Compañía de Transmisión del Mercosur (CTM), y la Transportadora de Energía (TESA) . 

Para el miércoles está previsto su llega a España y el diálogo con la Ministra de Hacienda, María Jesús Montero, país que si bien no tiene gran peso en las decisiones, adopta gran relevancia por las inversiones financieras y de telecomunicaciones en Argentina. 

El viernes Guzmán, acompañado por el representante argentino ante el FMI, Sergio Chodos, se entrevistarán en Francia con el Ministro de Finanzas de ese país, Bruno Le Maire, quien junto a su par de Italia y Alemania, llevan “la voz cantante” dentro del Club de París. 

Más allá de los inconvenientes financieros que traería caer en un nueva cesación de pagos, lo cierto es que Argentina ya ha estado en “default” con el Club de París desde la crisis de la Convertibilidad, en el 2001, hasta mayo del 2014, cuando el entonces ministro de Economía, Axel Kicillof, firmó un nuevo acuerdo. 

En esa oportunidad, el Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner aceptó un plan de pagos por US$ 9.690 millones de los cuales, US$ 4.955 millones correspondieron al capital, otros US$ 1.102 millones en concepto de intereses y los restante US$ 3.633 millones a punitorios, es decir cargos que se agregan por no haber pagado a tiempo.  

Gira europea: Guzmán intenta no caer en “default” con el Club de París 

Sin embargo, la tasa de interés antes del arreglo era del 7%, mientras que luego de la negociación con el Gobierno fue de entre el 3 y el 4,5 %, según datos del Ministerio de Economía.