La construcción es uno de los sectores de la economía que mejores perspectivas ofrece para el 2021. En ese sentido, desde el Gobierno acordaron con empresarios fijar precios de referencias en insumos para la construcción de viviendas y volúmenes de abastecimiento para la obra pública. 

Pero este acuerdo no es inocente. Hace un mes, en voz del presidente Alberto Fernández, desde el Gobierno apuntaron a empresarios de este sector que especulaban con la situación económica y retenían materiales para la construcción, e indicó a sus ministros a supervisar la situación con la Ley de Abastecimiento en mano.

Superado este contratiempo, este martes se reunieron representantes del Gobierno y del sector privado. Por el Ejecutivo participaron la secretaria de Comercio Interior, Paula Español y el ministro de Desarrollo Territorial y Hábitat, Jorge Ferraresi. Entre los empresarios asistieron SODIMAC, ALUAR, Cementos Portland, Cemento Avellaneda, Holcim, Easy, Falabella y Techint, entre otros, que apoyaron este principio de acuerdo.

Se consensuó, por caso, “establecer los precios iniciales pactados entre el Estado Nacional y los distintos eslabones involucrados en la cadena de la construcción para que oficien de valores de referencia”. Según comunicaron desde el Gobierno, los precios se actualizarán automáticamente por UVI (Unidad de Vivienda).

“Se trata de un mecanismo que busca transparentar los precios y el abastecimiento que corresponde para la promoción de la obra pública y también privada”, dijo Español y remarcó “queremos que el incremento que prevemos de la actividad impulsada por el Estado no se pierdan por el comportamiento de unos pícaros en algún lugar de la cadena”.

Ferraresi detalló que la idea de este compromiso de precios es “trabajar en conjunto y generar las potencialidades que tiene la articulación entre el sector privado y el público”.