El ministro de Economía, Martín Guzmán, anunció hoy su intención de reprogramar el pago de los US$ 2.100 millones que Argentina le debe al Club de París, y que vencen en mayo, a la espera del cierre de las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional.

“Estamos avanzando a pasos firmes con el FMI pero no hay que atarse a tiempos determinados, la prioridad es hacerlo bien”, dijo Guzmán durante su participación en la “Cumbre Latinoamérica 2020 del grupo Eurasia”. En ese marco, el funcionario, pidió “una reprogramación de los pagos con el Club de París; los diálogos se iniciaron antes de la pandemia y requieren un nivel de avance superior al de las negociaciones con el FMI”.

Guzmán estimó que marzo o abril serían “tiempos razonables” para iniciar las conversaciones con el Club de París, si bien aclaró que el Gobierno no se atará a ninguna fecha. Para el año próximo, el jefe de la cartera económica dijo que se observa “un horizonte de recuperación claro”, con un rol clave del plan plurianual que en breve será enviado al Congreso y que buscará tenga la mayor aprobación posible. 

“El programa va a tener metas de acumulación de reservas internacionales que nos permitan los controles de capitales que son defensivos que se corresponden con una situación de emergencia”, indicó. Guzmán aclaró que alcanzar el equilibrio fiscal, algo que reclama la oposición y el empresariado, “va a llevar más tiempo que lo que se pronosticaba antes de la pandemia”, y agregó que dicha consolidación “tiene que ir a una velocidad consistente con la recuperación”. Asimismo, aseguró que “no esperamos endeudarnos en moneda extranjera en los próximos tiempos”, a la vez que reiteró el objetivo de contar con más financiamiento en moneda local. 

“La deuda en moneda extranjera no es algo a lo que se apunta. Hay que tener cuidado con el endeudamiento en moneda extranjera. El país debería tener un aumento de las exportaciones para hacerle frente a esos financiamientos”, dijo Guzmán quien mañana tiene previsto canjear bonos en pesos por títulos en dólares por US$ 750 millones.

Guzmán auguró un 2020 finalizando con una inflación casi 20% menor a la de 2019, cuando llegó al 53,5%, y con una tasa en noviembre que resultará menor al 3,8% de octubre, la mayor del año. Además, para 2021 “esperamos un superávit comercial robusto, más allá de la recuperación económica”, que siempre hace crecer las importaciones, agregó.

En cuanto al frente cambiario, Guzmán consideró que se muestra “robusto” hacia adelante y dijo que las expectativas en este aspecto “se han anclado, las reservas caen menos cada semana y en la última semana acumulamos reservas; esperamos acumulación de reservas en 2021, 2022 y 2023”.