Los altos niveles de inflación, que en lo que va del año acumula 23,1% y es el valor más alto desde 1991, tienen un impacto directo en los ingresos que siempre terminan “corriendo de atrás” a los precios. Por caso, la última suba del Salario Mínimo Vital y Móvil, que fue significativa en comparación a los pequeños ajustes que venía mostrando, ya no alcanza para cubrir las necesidades básicas de alimentación.

Un informe de la consultora Focus Market ubicó en abril la Canasta Básica Alimentaria en $45.600 para una familia integrada por dos adultos y dos niños. Dicha cesta se incrementó 8,29% respecto a marzo y superó el incremento del haber mínimo dispuesto por el Consejo del Salario desde el 1 de junio.

La consultora releva vía Scanntech productos en 670 puntos de venta y así elaboran su Índice de Precios Canasta Básica Alimentaria Consumo Masivo. Este indicador refleja los datos sobre lo que necesitó cada uno de los hogares para cumplimentar la canasta, incremento promedio e interanual de precios, lo que más subió y bajó en forma interanual y desestacionalizada.

"El Gobierno adelantará el salario mínimo vital y móvil a junio de 2022 en un monto de $45.540 que es el mismo monto de la canasta básica alimentaria del mes de Abril. A su vez, si tomamos en consideración la canasta básica porteña se encuentra en $52.169. Es decir ya al mes de Abril está 13% abajo del adelanto de salario mínimo que se recibirá en Junio. El precio de los alimentos está siendo un gran problema para las familias argentinas donde en muchos casos están modificando su composición para no incrementar su gasto", afirmó el director de Focus Market, Damian Di Pace.

Por ejemplo, en abril, el consumo de carne vacuna fue de 47,7 kilos, 2,6% menos en relación al mismo mes del año pasado, de acuerdo a la Cámara de la Industria y Comercio de la Carne (Ciccra). Esta dinámica empeora cada vez más con los años y los precios en alza. 

Las estimaciones de los analistas ubican a la inflación más cerca del 70% que del 48% acordado con el FMI que seguramente será “recalibrado”. De cumplirse estas previsiones, el Gobierno enfrentará la suba de precios anual más alta desde la hiperinflación de 1991 previa al inicio de la Convertibilidad

La intención oficial siempre fue la de que “los salarios e ingresos le ganen a la inflación”, algo que efectivamente terminó sucediendo el año pasado. Sin embargo, al ver más de cerca la evolución de ambas variables durante todo el 2021 y también más atrás se observa que los precios fueron por ascensor y el ingreso de las familias por escalera

Un trabajo del Centro Estratégico Latinoamericano de Geopolítica (Celag) hizo hincapié en este tema, resaltando que por más que el salario en algún momento termine “alcanzando” la inflación, en “el mientras tanto” los trabajadores acumulan una pérdida de ingresos que suele ser despreciada, “pero que resulta muy significativa en contextos de inflación alta”. “Se cree que si el salario crece hasta igualar el avance de los precios el trabajador no habrá perdido poder adquisitivo. ¡Esto es un error!”, remarcaron.

El estudio dio el ejemplo de cuando se cumplieron los primeros 22 meses del Gobierno actual (octubre de 2021). Allí el salario mínimo alcanzó la inflación que se había generado desde el inicio de la gestión de Alberto Fernández, la pérdida acumulada de ingresos en ese período había sido de $94.000 a valor actual, es decir, 2,4 salarios mínimos. 

En ese sentido, el trabajo detalló que en los últimos 6 meses (de noviembre de 2021 a abril de 2022) se acumuló una pérdida de $21.000 adicionales a valor actual, más de medio salario mínimo. Así, “desde que comenzó el Gobierno hasta abril, los trabajadores acumulan una pérdida de ingresos equivalente a 3 salarios mínimos”, afirmó Celag.

Por último, el informe recordó que durante los últimos 2 años del Gobierno de Macri, “el salario mínimo quedó muy rezagado respecto al avance de los precios, a tal punto que los trabajadores acumularon una pérdida de ingresos equivalente a $131.000 a valor actual, equivalente a 3,4 salarios mínimos (de abril de 2022). Con el macrismo los trabajadores acumularon más pérdidas que durante la pandemia”.