Las transferencias de impuestos coparticipables crecieron 20,5% entre marzo de este año e igual período del 2020, pero la Ciudad de Buenos Aires (CABA) vio caer 48% en términos reales esos ingresos, advirtió hoy el Centro de Economía Política Argentina (CEPA).

A comienzos de septiembre, y luego de una protesta de la Policía Bonaerense que reclamaba aumentos de sueldo, el presidente, Alberto Fernández decidió auxiliar económicamente a Axel Kicillof, restándole 1% de la coparticipación que recibía la Ciudad.

Esa quita se destinó para lo que llamó "Fondo de Fortalecimiento Fiscal", que en el 2020 significó la pérdida de más de $ 31.000 millones, pero para este año rondará los $45.000 millones.

Ahora, el CEPA dio cuenta que las transferencias de la recaudación de impuestos de la Nación a las provincias aumentaron durante marzo un 20,5% interanual, suba que obedeció al bajo nivel de recaudación registrado en igual mes del 2020, y a los mejores desempeños en Ganancias e IVA.

En ese marco, y “al considerar la situación provincia por provincia, es posible distinguir que la pérdida en términos reales de las transferencias por Coparticipación tiene en sus extremos a CABA, con una caída de 48,2% interanual -como resultado de la reducción de aquellas vinculadas al costo de la policía y bomberos- y a Río Negro que recupera un 28,1%”.

Es un escenario donde, salvo la Ciudad de Buenos Aires (CABA), “el resto de las provincias le ganan fuertemente a la recaudación del año anterior ajustada por inflación por sexto mes consecutivo”, aseguró el CEPA. La casa de estudios apuntó que, en valores del 2019, la coparticipación representaba el 27 % de los recursos con los que contaba CABA, mientras que para otros distritos, como la Provincia de Buenos Aires, supone el 50%, mientras que para La Rioja es el 91% y para Formosa el 93%.