Las Bolsas de Cereales y de Comercio del país, que lideran en Consejo Agroexportador (CAA) cerraron filas hoy con los productores de la Mesa de Enlace Agropecuaria y criticó la decisión del Gobierno de suspender hasta marzo las exportaciones de maíz.

“Las restricciones a las exportaciones son una política distorsiva, que impide el normal y transparente funcionamiento de los mercados”, destacó un comunicado firmado por todas las Bolsas.

Con restricciones como esta se afecta “el proceso de formación de precios y se incrementa la incertidumbre para la toma de decisiones, dañando los incentivos para producir e invertir a lo largo de toda la cadena de valor”.

La nota lleva entre otras firmas, la del presidente de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, José Martins, quien hace las veces de vocero del Consejo Agroindustrial Argentino, la entidad que reúne a más de 60 entidades del sector, entre ellos los productores de cerdo, pollos y feedlot, que serían los beneficiarios de la restricción a las exportaciones. 

Los integrantes del Consejo trabajan juntos al Gobierno en un plan destinado a aumentar la productividad de las distintas cadenas agroindustriales a fin de fomentar el agregado de valor, la generación de 120.000 empleos directos y otros 580.000 indirectos en cuatro años, y el crecimiento de las exportaciones hasta los US$ 100.000 millones para el 2025.

Pero en septiembre, cuando el Gobierno decidió bajar temporalmente las retenciones a las exportaciones de soja, eso generó la crítica de algunas entidades que vieron en eso una jugada en favor de las exportadoras, que integran el Consejo.

Ahora, la declaración, que se produjo menos de 24 horas después de que la propia Mesa de Enlace Agropecuaria, advirtió que “la propia experiencia argentina en materia de restricciones a las exportaciones demuestra que su aplicación desincentiva la siembra y la inversión en tecnología, lo que deriva en menores volúmenes de producción y resultados contrarios a los buscados”.

El comunicado incluso apunta a razones técnicas al asegurar que “de acuerdo a estimaciones públicas y de las Bolsas, la situación de la oferta y la demanda de maíz reflejan existencias que se encuentran muy por encima de las necesidades del mercado doméstico y la exportación”. 

Por otro lado, “poner un límite a las exportaciones es una medida que va en el sentido opuesto a la necesidad de una economía en crisis y necesitada de divisas”, destacaron las Bolsas de cereales y de comercio de todo el país.