Por la preocupación sobre las renovadas medidas de confinamiento en Europa y Reino Unido, junto a la incapacidad de EEUU de acordar un estímulo para millones de desempleados, y a la reciente filtraciones de datos en bancos, las principales bolsas del mundo y los commodities sufrieron este lunes un desplome generalizado y tocaron mínimos de hasta casi tres meses, lo que volvió a golpear a los maltrechos activos argentinos. 

En ese contexto, el riesgo país argentino subió 6,27% y alcanzó los 1338 puntos, los bonos se hundieron hasta casi 6% (liderados por los de Ley de Nueva York) y las acciones argentinas registraron pérdidas de hasta 7,4%, lideradas por YPF, Despegar, y Tenaris, en medio de la incertidumbre sobre el futuro de la 
economía argentina, tras las recientes trabas impuestas por el Banco Central (BCRA) al mercado de divisas. La bolsa porteña, a su vez, retrocedió solo 1,8%, sostenida por una suba de los dólares financieros.

Medido en dólares, el S&P Merval cayó este lunes por debajo de los u$s 300 (u$s291,37 al tipo de cambio contado con liquidación, mínimos desde marzo pasado) un umbral visto en crisis importantes, como la del Tequila en 1994, la de la Convertibilidad en 2001 (se hundiría hasta u$s70 en 2002), la financiera de 2008 o la de la nacionalización de YPF. “El mercado está poniendo precios de otra crisis, con un derrumbe de 70% desde las PASO y de 48% en 2020”, analizó Nery Persichini, jefe de Estrategia de GMA Capital.

Desde Portfolio Personal Inversiones dijeron que "las restricciones impactaron negativamente en las perspectivas de las empresas argentinas que ya venían muy golpeadas por el difícil contexto económico actual. Principalmente, por las nuevas condiciones de refinanciamiento de la deuda corporativa".

“Argentina como siempre se solidariza con las bajas de los mercados del mundo acompañando, pero no siempre en las subas”, indicó a Data Clave, Rafael Di Giorno, director de Proficio Investment.

En el mercado, llama la atención puntualmente la perfomance de los nuevos bonos, que se estaban acomodando a la salida del canje y buscaban normalizarse en tasas de entre 11,5/12,5% anual en promedio, pero con las recientes bajas, los rendimientos saltaron a niveles de 13,75/15,75% anual, con paridades promedio nuevamente en la zona de 42/44%.

"Sorprende que un país a una semana de reestructurado (en su deuda pública) vuelva a cotizar como cuasi/defaulteado. Los flamantes bonos largos que comenzaron a cotizar la semana pasada descuentan en significativa magnitud otra reestructuración", dijo el economista Germán Fermo, de la consultora MacroFinance. Y remarcó: "Tenemos hoy un riesgo país superior a la República del Congo y los bonos largos recién estrenados descuentan una nueva reestructuración potencial de 75%”. En la misma línea, el economista y socio en FMyA., Fernando Marull, dijo que “Argentina rinde lo mismo que cuando estaba en default. Medio ridículo”.

En el mercado cambiario local, por su parte, el blue rebotó hasta los $141, mientras que los dólares bursátiles treparon hasta casi $140 (en el caso del “contado con liqui”). Las brechas se ubican entre el 76% y 86%. El nuevo dólar solidario, en tanto, alcanzó los $131,52. En medio de la crisis de las reservas, el Banco Central terminó con un saldo a favor en sus intervenciones diarias. Según operadores habría comprado entre 16 y 50 millones de dólares, en otro día de virtual feriado cambiario ante la posibilidad de los ahorristas de adquirir el dólar ahorro en los bancos, en medio de un ajuste de sistemas tras el endurecimiento cepo. 

“Pensamos que las medidas ayudarán a reducir la presión sobre reservas, pero a costa de una mayor brecha, y potencialmente menor inversión en los próximos años y mayores rendimientos en los bonos Soberanos, Subsoberanos y Corporativos”, comentaron desde Balanz Capital. Por otro lado, los precios del petróleo cayeron cerca de un 4%, el dólar en el mundo avanzó, mientras que el índice de monedas de mercados emergentes sufrió su mayor declive en seis meses. 

Las bajas generalizadas en los mercados se produjeron luego de que se conociera que Reino Unido estudiaba un segundo confinamiento nacional ante el aumento de los casos en al menos 6.000 diarios, mientras Dinamarca, Grecia y España introdujeron nuevas restricciones a la actividad. Asimismo, el ministro de Salud alemán admitió que el aumento de las infecciones en países como Francia, Austria y Holanda es preocupante.

El nerviosismo del mercado aumentó por la agitación generada en la campaña presidencial estadounidense ante la muerte de la jueza de la Corte Suprema Ruth Bader Ginsburg, considerada un icono liberal.  Es que la muerte de Ginsburg también reduce las posibilidades de que el Congreso apruebe otro paquete de estímulo para ayudar a impulsar a la economía local. "Con este nuevo desarrollo va a haber poco ancho de banda para presentar un nuevo proyecto fiscal", dijo Tom Martin, de GLOBALT Investments en Atlanta.

En Wall Street, por su parte, el Dow Jones perdió un 1,8%; el índice S&P500 cedía un 2,2; y el Nasdaq restaba un 1,3%. En Europa, las principales bolsas cayeron hasta 4,4% (Dax de Alemania), y el índice paneuropeo STOXX 600 declinó un 3,2%. Los mercados se veían impactados también por un reporte de medios que mostró como varios bancos globales movieron grandes sumas de fondos supuestamente ilícitos durante cerca de dos décadas. El subíndice bancario del S&P declinó un 4,5%.

En el resto de las materias primas, los precios del oro cedieron un 3%, mientras que los granos perdieron hasta 3,5% (lideraba las bajas el trigo).