El G-24, foro que nuclea a 24 países en desarrollo, sesionó este lunes en Washington en el marco de la Asamblea Anual del FMI y el Banco Mundial. Volvieron a reclamar al FMI la revisión de su política de sobrecargos a los préstamos, al tiempo que pidieron “profundizar las medidas de financiamiento a países en desarrollo para apuntalar la salida de la crisis del Covid-19”.

Durante este lunes, un sitió especializado en finanzas aseguró que el FMI había rechazado discutir las sobretasas. El gobierno desmintió haber hecho aún un reclamo oficial y salió al cruce de la versión periodística.

En sintonía con esta disputa, desde el G-24 enviaron un comunicado donde solicitaron al “FMI que considere la revisión de los límites de acceso y de la política de sobretasas. Instamos al FMI a corregir el carácter regresivo y procíclico de la política de sobretasas y a suspender, o al menos a reducir sustancialmente, los recargos existentes con el fin de apoyar las respuestas a la pandemia”, apuntaron en el texto.

El G-24 también pidió el redireccionamiento de los Derechos Especiales de Giro (DEG) emitidos por el FMI hacia los países de ingresos bajos y medios que más necesitan asistencia para lidiar con los efectos económicos de la pandemia y saludaron la propuesta del organismo para la creación de un Fondo de Resiliencia y la Sostenibilidad (FFRS) con mejores condiciones de financiamiento para los países en desarrollo.

“Celebramos la nueva asignación de derechos especiales de giro (DEG) equivalente a USD 650.000 millones para apuntalar la liquidez mundial, que es una importante respuesta internacional a la crisis de la pandemia. Instamos a una canalización voluntaria significativa de DEG desde los países con sólidas posiciones externas hacia los países de bajo y mediano ingreso que necesitan apoyo”, destacaron desde el nucleamiento.

Por otra parte, el grupo de países del que forman parte países de la región como Argentina, Colombia, Perú, Brasil y México, también celebró “la introducción de un impuesto mínimo de sociedades a nivel mundial para hacer frente a la competencia fiscal perniciosa y de nuevas normas para asignar una proporción de los beneficios imponibles de las multinacionales a los países de mercado”

“Esperamos que la solución multilateral en el marco del enfoque propuesto de dos pilares genere ingresos significativos para las economías emergentes y en desarrollo, lo que representa un paso importante hacia un sistema internacional de impuestos de sociedades más justo y estable”, señalaron. 

Por último, llamaron a fortalececer “la cooperación multilateral para aumentar el suministro de vacunas y garantizar un acceso equitativo de todos los países a vacunas asequibles, que constituye el bien público más crítico en esta coyuntura”.