A casi 24 horas de anunciadas las medidas, y tras conocer el primer impacto de estas en los mercados, el presidente del Banco Central, Miguel Pesce, aseguró que el objetivo de las nuevas restricciones es “crecer el 50% (US$90.000 millones) en las exportaciones”, y espera que toda la sociedad "se comprometa y acompañe en esta misión".

Señaló que esta era la única alternativa posible porque “lo que no podemos hacer es salvar el bache de dólares con más endeudamiento”. “Esto era necesario. Las divisas son fundamentales para sostener el nivel de actividad”, insistió Pesce en declaraciones al programa A Dos Veces de TN.

Además, negó que haya un atraso cambiario: “Estamos preservando el valor del dólar oficial. Ese dólar es competitivo. Ningún sector nos habla de atraso cambiario”. Según Pesce, estas nuevas restricciones no impedirán la llegada de nuevas inversiones, eso sucedería “si tenemos una crisis seria de balance cambiario”. Aseveró también que “de ninguna manera” la nueva retracción (del 35% sobre Ganancias y Bienes Personales, que llevará al dólar a $132) vendrá aparejado de un aumento de precios.

Respecto a la obligación para las empresas de reestructurar la deuda, argumentó: “Las empresas aprovecharon  una buena oportunidad por la tasa de interés que hemos encontrado. Pero necesitamos que reestructuren los vencimientos que tienen a partir del 15 de octubre y por un semestre”. 

Sobre los temores que generó la medida, Pesce afirmó que “los depósitos en dólares hace algunos meses que dejaron de caer. La gente se siente segura y no hay ninguna razón para retirar los dólares de los bancos”.

Respecto al dólar blue, describió que "hay gente de buena voluntad que quiere ahorrar en dólares en lugares muy agradables con gente que le sonríe y demás. Pero detrás de ese negocio también se cierran los negocios de actividades delictivas. Y lo hemos comprobado con allanamientos en las cuevas".