Cuando el Gobierno anunció la tercera etapa del Dólar Soja, a un tipo de cambio de $ 300, y lo extendió a los productos regionales, hablaban de una recaudación de al menos US$ 5.000 millones, para finales de mayo, cuando venciera el plazo para liquidar la oleginosa y sus derivados.

Durante abril, el ingreso de divisas del complejo cerealero y oleaginoso alcanzó los US$  2.416 millones de dólares, y de ese total, dos terceras partes, US$1.605 millones ingresaron bajo el Programa de Incentivo a las Exportaciones, informó este viernes la Cámara de Industria Aceitera y el Centro de Exportadores de Cereales.

Tweet de Cámara de la Industria Aceitera Argentina (CIARA)

Lo cierto es que esto se produce “en un contexto de extrema sequía, con pérdidas millonarias para la cadena agroindustrial desde los productores hasta la industria exportadora, que está atravesando el peor año en materia de actividad en las fábricas y puertos con niveles de capacidad ociosa superiores al 70%”, según Ciara-Cec.

Además, la recolección de la magra cosecha viene muy demorada. La Bolsa de Cereales de Buenos Aires, aseguró que, para esta semana, se había levantado un área 17% inferior a la de abril del año pasado, y con rindes muy bajos de acuerdo a la falta de lluvias.

La Bolsa de Cereales de Buenos Aires no descartó un nuevo recorte en sus estimaciones de cosecha de soja, que hace una semana redujo a 22,5 millones de toneladas, debido a la merma de los rindes, por debajo de lo esperado.