El ex vice ministro de Economía, Emanuel Álvarez Agis recomendó no pagarle al Fondo Monetario Internacional (FMI) el vencimiento de diciembre, porque dejaría al país en una endeble situación cambiaria, y afectaría incluso la negociación con el organismo.

Además, advirtió que la actual situación “no es similar a la del 2001 porque Argentina no está en deflación” y “quienes piensan que tiene que venir un (Jorge) Remes Lenicov, que haga la devaluación, absorba la crisis, para que luego, en dos años la economía vuelva a crecer se equivoca. Si Fernández la choca, Larreta va a tener cuatro años muy malos”.

Una crisis como la del 2001 para Alberto Fernández, "se puede llevar puesto también a Rodríguez Larreta”, advirtió Álvarez Agis durante una conferencia virtual brindada por la casa de inversión “Quinquela Fondos”.

El ex vice ministro de Economía de Axel Kicillof dijo que: “el pago de diciembre al FMI hay que evitarlo a toda costa porque nos quedamos con la mitad de las reservas netas del país y nos exponemos a un riesgo cambiario que nos complique, incluso, para una negociación a posterior con el mismo Fondo”.

En este marco “es necesario un acuerdo, con el FMI cuanto antes o un waiver (dispensa para no pagar) para tener un diciembre y enero en paz, porque con el dinero que ingresa (a partir de febrero) de la cosecha fina gruesa no alcanza”.

El titular de la consultora PxQ consideró que un acuerdo con el Fondo “tiene foco más en lo fiscal que en lo cambiario, ya que mismo organismo se ha manifestado que una devaluación afectaría la sostenibilidad de la deuda”.

En materia fiscal hay para  discutir. El gobierno presentó un proyecto de ley de Presupuesto para el 2022 con un déficit fiscal del 3,3% “para negociar” una rebaja con el organismo, y apuntó a que la previsión de 2,6 puntos porcentuales del PBI para la obra pública “en un año no electoral, se podría negociar”.

Sin embargo, advirtió que un nivel de déficit de 1,5 puntos del PBI “requiere de unos US$ 8.000 millones de financiamiento, y eso habrá que pedirlo al exterior” con un acuerdo con el Fondo, con swaps con Rusia y China de ser necesario, “que permita ir relajando el mercado cambiario”.
Este eventual acuerdo “no hará que el Riesgo País baje a 600 puntos, sino que le pondrá un límite al deterioro, y a partir de allí, llevar adelante el programa económico que Argentina se haya comprometido a llevar”.

“La palabra clave es gradualismo fiscal y cambiario. Si es gradual, el 2022 no será un año amable, pero se despejarán las incertidumbres para el 2023 y ahí habrá que ver si el Gobierno cumple con la restricción fiscal con la que se ha comprometido en un año electoral”, advirtió Álvarfez Agis.

Además, para lograr todo esto “tiene que haber un programa macroeconómico que acomode todas las variables”, reconoció el ex funcionario.