El mundo digital se vio paralizado esta mañana debido a una falla a nivel mundial de Internet, que dejó inutilizadas varias webs de servicios y medios de comunicación a lo largo y ancho del planeta. Y esa caída global de la World Wide Web tuvo un único responsable, la empresa Fastly.

Se trata de un Content Delivery Network, o CDN, que es una manera de definir a redes de servidores distribuidos geográficamente que ayudan a las diferentes páginas web a entregar sus contenidos en cualquier parte del mundo de una forma rápida y segura. 

Cabe recordar que muchas de las páginas que miles de millones de usuarios consultan a diario están ubicadas en un único lugar físico, por lo que, para acceder a ellas, todo lo que contienen tiene que viajar desde su servidor a los distintos dispositivos desparramados en todo el mundo. Y cuanto más lejos están el uno del otro, mayor es el tiempo de carga y peor la experiencia del usuario.

Allí es donde cobra relevancia la función de los CDN como Fastly, justamente tienen la labor de que eso no ocurra. Para ello, replican las webs de sus clientes o algunos de sus contenidos estáticos, como el diseño o las imágenes, en varios servidores distribuidos geográficamente para que la persona pueda acceder a la página desde el que tiene más cerca, de tal forma que la velocidad de carga se reduce considerablemente. También cumplen un importante papel de respaldo, ya que si un servidor falla, conectan con otro que siga funcionando, de tal manera que ni el acceso ni la velocidad de carga de la página se vean perjudicadas.

Cabe destacar que los problemas en este tipo de red no son habituales, pero cuando ocurren, no solo se cae un sitio en particular sino todas las que forman parte. De ahí el apagón total registrado esta mañana. Por la cantidad de las páginas afectadas y el tiempo que han estado inoperativas, evidencia un fallo relativamente serio en la infraestructura. Por el momento, Fastly no explicó los motivos del fallo.

El otro tema a tener en cuenta es que la caída de Fastly ha puesto de manifiesto que la dependencia de un único proveedor en un punto clave de las telecomunicaciones puede ser crítico si éste falla de forma masiva.