El 6 de noviembre de 1820 -exactamente hace 201 años- David Jewett izó por primera vez la bandera Argentina en el territorio malvinense y emitió comunicaciones al respecto dirigidas a los cazadores de lobos marinos y de ballenas, que de varias nacionalidades estaban allí presentes. El explorador británico James Weddell fue testigo del hecho.

Con este acto formal, las islas quedaron bajo pacífica posesión de las Provincias Unidas del Río de La Plata hasta la ocupación británica de 1833.

A 201 años del día que se izó por primera vez la bandera argentina en las Islas Malvinas

Preocupado por la explotación ilegal de ballenas y focas en los mares del sur, a principios de 1820 el gobierno de la provincia de Buenos Aires (del que dependían las islas)​ decidió enviar a un oficial para que hiciera formal toma de posesión del archipiélago y obligara a acatar sus disposiciones administrativas concernientes a la actividad pesquera.

El 15 de enero de 1820 el ministro de guerra y marina de las Provincias Unidas, Matías Irigoyen, emitió un despacho nombrando «con el grado de coronel de ejército al servicio de la marina» al coronel de origen estadounidense David Jewett quien estaba registrado al servicio de las Provincias Unidas desde 1815.

En el mes de febrero, el Director Supremo de las Provincias Unidas del Río de la Plata, José Rondeau, decidió enviar un oficial para que se hiciera cargo de las islas, pero el hecho no se concretó sino hasta fines de ese año, cuando el gobernador de Buenos Aires, Martín Rodríguez, nombró a Jewett «comisionado por el Supremo Gobierno de las Provincias Unidas para tomar posesión de las islas en nombre del país a que éstas pertenecen por ley natural».​ Según José María Rosa, Jewett fue enviado en marzo por orden de Manuel de Sarratea.​

A 201 años del día que se izó por primera vez la bandera argentina en las Islas Malvinas

Al mando de la fragata Heroína llegó a la bahía de la Anunciación a fines de octubre. Siguiendo órdenes de sus superiores, Jewett prohibió la caza y pesca en la jurisdicción de las islas a los buques extranjeros, distribuyendo una circular entre aquellos estacionados en las proximidades, en la que hacía referencia a la formalización del traspaso de soberanía desde el Virreinato del Río de la Plata a su sucesor, las Provincias Unidas. El 2 de noviembre le fue remitida una copia al mismo James Weddell, explorador británico de la Antártida (quien de regreso a Londres informó a su gobierno), cuya embarcación fue avistada en aguas argentinas

El coronel Jewett arribó a Puerto Soledad el 6 de noviembre de 1820 y tres días más tarde, en nombre del gobierno de las Provincias Unidas del Río de la Plata, tomó posesión formal del antiguo fuerte español, efectuando una salva de veintiún cañonazos con la fragata. Luego leyó la proclama extendida por las autoridades, redactada en español e inglés -esta última legalizada por el cónsul británico en Buenos Aires– e izó la bandera argentina en un mástil improvisado ante la cincuentena de buques pesqueros que se encontraban ilegalmente en las cercanías (de los cuales al menos diez eran estadounidenses y seis británicos).​

La tripulación de la Heroína también estaba integrada, en su mayor parte, por británicos y norteamericanos, contando con los esclavos José y Antonio Zimmermann.​ La fragata, fue considerada «Buque de Estado» por el gobierno rioplatense, es decir navío regular y no corsario.​ La fragata también trasladaba argentinos para instalar una población criolla en el antiguo Puerto Soledad.

Weddell reportó que la nave de Jewett recibió su asistencia en la obtención de anclaje fuera de Puerto Soledad y en pocos días, «tomó posesión formal de estas islas para el gobierno patriota de Buenos Ayres [sic], leyó una declaración en virtud de sus colores, plantado en un puerto en ruinas, y disparó una salva de veintiún cañonazos».​ Weddell también vinculó la ceremonia con la demanda de Jewett de los restos del naufragio del Uranie y comentó que se preparó para impresionar a los capitanes de buques en la zona.

Posteriormente, años despues, el 10 de junio de 1829, Vernet se estableció oficialmente en la isla Soledad y fue nombrado primer comandante político militar en las Islas Malvinas. Bajo el pabellón argentino, se comprometió a hacer cumplir la legislación argentina, cuidar sus costas y los reglamentos de pesca vigentes.