Alquilar en la Ciudad de Buenos Aires se volvió una odisea para la mayoría. Para poder acceder a un departamento de dos ambientes, hoy se necesitan 2,7 salarios mínimos, según el último relevamiento del Centro de Estudios Metropolitanos (CEM). Y eso, sin contar las expensas, que siguen subiendo muy por encima de la inflación.

El salario promedio apenas alcanza para cubrir el 63% del valor de un alquiler de dos ambientes. Si se suma el costo de las expensas, que representan casi el 17% extra, el escenario se vuelve directamente inviable. Aún con la desaceleración inflacionaria, los ingresos de trabajadores y trabajadoras siguen perdiendo frente a los precios.

Según el informe del CEM, en mayo de 2025 un alquiler de un ambiente rondaba los $530.000, mientras que para un dos ambientes el valor oscilaba en los $600.000, con techos que llegan hasta los $812.000, de acuerdo al Centro de Estudios Económicos y Sociales Scalabrini Ortiz (CESO). Para unidades más grandes, de tres ambientes, el precio trepa entre $850.000 y $1.185.000.

“Si se miran los incrementos acumulados para este año, los alquileres se incrementaron un 16,9%, superando el incremento general (12,9%) y el del rubro vivienda (14,1%), evidenciando una presión persistente sobre los hogares inquilinos pese al contexto general de desaceleración inflacionaria”, detalla el informe del CEM.

Los jubilados enfrentan una situación todavía más crítica: con el haber mínimo (bono incluido), un hogar debe destinar 2,27 jubilaciones completas solo para pagar el alquiler de un departamento de dos ambientes.

Las expensas, por su parte, no dan respiro. En mayo, el aumento mensual fue del 2,35% y se ubicaron en $140.108 promedio. En lo que va del año, acumulan una suba cercana al 5%, y si se toma el último año, el incremento fue de más del 88%. “Estos gastos arrastran una inflación fuerte, muchas veces asociada a servicios, mantenimiento e impuestos del edificio”, advierte el CEM.

A la falta de poder adquisitivo, se suma un problema de fondo: la escasa y mal distribuida oferta. En mayo se registraron 17.287 unidades en alquiler permanente, un leve crecimiento mensual del 4,4%, pero con una caída interanual superior al 17% respecto a junio de 2024.

La desigualdad también se refleja en el mapa porteño. La mayoría de las ofertas se concentran en el corredor norte, con Palermo como el barrio con más publicaciones (24,3% del total), seguido por Recoleta, Belgrano y Caballito. En cambio, zonas del sur como Villa Riachuelo, Villa Soldati o Villa Real tienen menos de cinco publicaciones cada una.

“Esto da cuenta de un acceso fuertemente restringido en determinadas áreas de la Ciudad y se evidencia una desigualdad territorial estructural entre el norte y el sur. En este caso, a mayor oferta, mayor precio, y la localización de la oferta limita la posibilidad real de elección para quienes alquilan. A su vez, la disparidad de precios según cantidad de ambientes refleja un mercado poco adaptado a las necesidades habitacionales más urgentes, como las de hogares con hijos o necesidad de mayor superficie”, concluye el CEM.