Después de una investigación que se extendió durante seis meses y que se inició por reportes que llegaron desde los Estados Unidos se detuvo en Rosario a un policía acusado de distribución de pornografía infantil.

El hombre, que se desempeñaba durante las noches como guardia de seguridad en el Jockey Club de Rosario, quedó imputado por al menos 43 hechos de distribución de imágenes de abuso sexual infantil, agravados por tratarse de representaciones de menores de 13 años.

Según informó la prensa en Rosario, el detenido era efectivo de la policía provincial y durante la noche realizaba tareas de vigilancia en el Jockey Club de Rosario y usaba el wifi de las instalaciones del predio para distribuir las imágenes.

La investigación se inició a partir de reportes recibidos por la Unidad Fiscal Especializada en Delitos y Contravenciones Informáticas (UFEDyCI) del Ministerio Público Fiscal de CABA, según se informó. 

Los reportes fueron enviados a esa unidad especializada por la NCMEC (National Center por Missing and Exploited Children), un organismo privado sin fines de lucro creado por el Congreso norteamericano en 1984 para combatir la explotación infantil.

Con los informes recibidos, la fiscal Daniela Dupuy,  titular de la UFEDyCI, dio inicio a una investigación conjunta que logró detectar más de 60 reportes vinculados, siendo que en todos ellos se utilizaba la IP del Jockey Club de Rosario, pero con perfiles sin aparente conexión entre ellos. 

La investigación, que duró más de 6 meses y estuvo a cargo del fiscal Ramiro González Raggio del Ministerio Público de la Acusación de Santa Fe y la investigadora Marianela Cordones, y además contó con la colaboración de la Agencia de Trata de Personas, logró establecer los lugares concretos de conexión y finalmente la identidad del responsable.

En una serie de allanamientos simultáneos que se realizaron en Rosario, se logró la detención del hombre que ya cumple con prisión preventiva y enfrenta penas de 4 a 50 años de prisión, según se informó.

“El policía iba rotando entre el puesto 2 y el puesto 6, ingresos en la parte trasera del club. Hackeaba cuentas de Facebook a través de las cuales distribuía el material y se lo enviaba a un número indeterminado de personas. Está en investigación de dónde obtenía el material y también hay material inédito, puede que sea de producción casera”, sostuvo el fiscal, que evaluó que la pena en expectativa es “de cuatro a 50 años teniendo en cuenta el concurso de los 43 hechos detectados”, dijo el fiscal de Delitos contra la Integridad Sexual, Ramiro González Raggio.