La situación epidemiológica en la Provincia de Buenos Aires, pese al último pico con el récord de casos a nivel nacional, está estabilizada. Desde el Ministerio de Salud bonaerense ven el aumento de casos, pero con una curva amesetada. 

Esta situación, si bien no es de relajo, permitió que vuelvan algunas actividades deportivas, pero siempre al aire libre y dentro de los clubes. Una nueva prueba para analizar si se puede sostener, o si hay que "apretar el botón rojo", que tanto dice el Alberto Fernández.

A su vez, desde Salud analizan y confeccionan protocolos para la temporada de verano, pero hasta ahora no es más que una situación de deseo. Dialogó con Data Clave Leticia Ceriani, subsecretaria de Gestión de la Información, Educación permanente y Fiscalización del Ministerio de Salud bonaerense.

La entrevista completa:

Data Clave: ¿Cómo está la situación epidemiológica en Provincia de Buenos Aires?

Leticia Ceriani: Estamos con un número sostenido de casos, con una curva que parece haberse amesetado, pero esto es muy reciente. Por otro lado, si bien está estabilizada, está en un número alto de casos, por eso uno no puede pensar en relajar demasiado. Lo mismo para el nivel de ocupación de camas. Habrá que esperar unos días más para ver si esto se mantiene, y ver cómo se puede seguir.

DC: ¿Los sorprendió los números del jueves?

LC: Ayer tuvimos un pico, en Provincia lo mismo. No nos sorprendió, porque no creemos que todavía sea momento para el descenso de casos. Lógicamente que uno no es lo que desea, veníamos con 4 mil casos diarios y ayer dimos un salto a más de 5 mil. Pero son los números que venimos manejando, no echa por tierra que los números siguen estables. Uno no puede tomar decisiones certero mirando día por día, hay que ver toda la película y observar cómo evoluciona la curva.

DC: ¿El aumento se debe a la circulación? Da la sensación por momentos que se le perdió respeto al virus en la sociedad…

LC: Estamos viendo que los números de circulación aumentan, y es cierto que tiene que ver con eso. El aumento de circulación se dio desde el último retroceso de julio en AMBA. Vemos que está en un 63%, según la última medición de ocupación. Es el momento donde hay mayor circulación, pero también indica que tenemos un 40% menos  de gente. Hay una parte de la población que sigue en su casa y que cumple con todas las medidas. Hubo un aumento, sí, eso subió la curva, pero los números se mantienen estable y hace que la tasa no crezca a tanta velocidad.

DC: ¿Cómo está la Provincia a nivel infraestructura?

LC: Duplicamos las camas de cuidados intensivos y seguimos incorporando camas, nos dio mucho tiempo. Pero no es solo una cama, es también el equipamiento. Pero hay que tener algo en cuenta, el sistema de Salud no se puede ampliar eternamente, tiene un límite fáctico. Por ende, si no hay control, por más que se amplíen los sectores, llega un momento que el sistema hospitalario colapsa. Hay municipios que han llegado al 100% de la capacidad, por eso hay que tener mucho cuidado porque estamos en un número estable, pero no deja de ser alto. No hay mucho margen.

DC: ¿Por qué la visión entre Larreta y Kicillof a veces se torna distinta? Si bien es cierto que trabajan juntos, en la conferencia muchas veces plantean lo contrario…

LC: Creo que hay diferencias a la hora de comunicar, sin dudas; y hay diferencias en algunas acciones o decisiones que se toman. Pero no hay diferencias en cuanto a los diagnósticos, con los trabajadores de Ciudad coincidimos en que no hay que relajarse y que el problema no está resuelto. Ellos tienen la tasa más alta de caso cada 100 mil habitantes y en nivel de ocupación de camas. Y esto se traslada al primer y segundo cordón del Conurbano. Las decisiones tienen que ser en conjunto, como venimos trabajando. Es la única forma de tener buenos resultados.

DC: ¿En qué situación están los trabajadores de la Salud? En sectores de la Ciudad le mencionaron a este medio el “estrés médico” generalizado que hay…

LC: El sistema de Salud está muy estresado en todo el AMBA, en Provincia también tenemos al equipo sanitario muy cansado y en una situación muy compleja. Eso genera mucho cansancio físico por las horas de trabajo, y mucho estrés por la exposición tanto para ellos como para sus familiares. En Ciudad obviamente que por el nivel de ocupación hay mucho más estrés, porque tienen que llegar a decidir a quién atienden y a quién no. Por eso es necesario apelar a la responsabilidad para que los trabajadores no estén tan expuestos. En Provincia trajimos insumos de China y mucha cantidad de equipamiento para reducir el peligro, pero esto depende de un todo.

DC: ¿La vuelta a los deportes individuales significa un buen síntoma y un control de la situación?

LC: Por supuesto, por eso venimos trabajando en los protocolos y temas puntuales para evitar los riesgos. Está bueno empezar a tener este tipo de actividad, que cooperan para un buen estado de Salud. Pero hay que hacerla de manera muy cuidada; y como dijo el Presidente, en caso de peligro, se aprieta el botón rojo y se vuelve atrás.

DC: ¿Por qué los runners no pueden salir a las plazas cómo el caso de CABA? ¿Es crucial evitar la aglomeración?

LC: Esto solamente está permitido en los municipios que están en Fase 5. Los de Fase 3, no, ahí se van a habilitar las actividades en clubes al aire libre y de forma individual. No se puede tener actividades recreativas como salir a correr o caminar a la calle.

DC: ¿Hay poco nivel de contagio en este tipo de deportes? De ser así, ¿por qué se tardó en la decisión?

LC: Si, una persona jugando un deporte individual al aire libre, tiene muy poco nivel de contagio. El problema jamás fue el deporte en sí. El riesgo está en habilitar actividades que generen mayor nivel de circulación en la gente. Y eso está comprobado, a mayor circulación, mayores contagios. El cuidado que hay que tener tenía más que ver con eso. En la medida en que el deporte sea individual, al aire libre, y cumpliendo el protocolo, no debería haber ningún riesgo.

DC: ¿Cuáles serían los principales riesgos de contagio en estos deportes? Por ejemplo tenis y golf…

LC: Es necesario el control de síntomas, principalmente. Y luego lo que sería peligroso es compartir los elementos y la presencia de los vestuarios, pero ya está reglamentado su uso. La idea es que no haya vida social en los clubes, solo deportes y que cada uno tenga sus propios elementos. Los gimnasios en Fase 5, por ejemplo, el protocolo establece que los elementos tengan que ser desinfectados antes que lo utilice otra persona. Pienso en una raqueta, un palo de golf, por ejemplo, y obviamente que lo prioritario es que cada uno tenga su elemento. Esto no quiere decir que no ocurra un contagio, pero si se cumple un protocolo, es muy difícil que ocurra.

DC: ¿Es muy lejano pensar en la vuelta de las escuelitas de fútbol? Se dice que los niños son los que transmiten el virus con mayor facilidad…

LC: Es difícil pensar eso en hoy, sobretodo porque reúne más de una persona y también tiene otros problemas, como con el sistema educativo. En el fútbol está el riesgo entre los chicos, porque también es muy difícil pedirles que no se encimen y amontonen. Y luego está la circulación de adultos, porque alguien los tiene que llevar, y muchas veces también los padres se quedan hablando para no dejar a los chicos solos. Ya no pasa a ser la actividad en sí misma, sino el aumento de la circulación de personas.

DC: Matías Lammens no descartó la temporada de verano, ¿desde Provincia ven que sea posible?

LC: Nosotros tampoco la descartamos en ningún momento, ojalá la tengamos lo más parecida posible a las temporadas normales. Pero a cuatro meses de la situación, es muy difícil pensarlo. Hoy no están dadas las posibilidades para que la gente vaya masivamente, porque además es un riesgo para los municipios sin casos. Tendremos que ver cómo está la situación, y en función de eso, ver qué tareas se pueden desarrollar.

DC: ¿Se está trabajando en protocolos?

LC: Venimos trabajando con balnearios sobre esto, obviamente que queremos que la población pueda tener días de descanso y tranquilidad. Estamos trabajando mucho con esto y confeccionando protocolos para otros sectores turísticos. Nos estamos anticipando para que esto pueda ocurrir. Pero recién cercanos a la fecha podremos tener una mirada más concreta.

DC: ¿El agua del mar podría ser transmisora del virus?

LC: No, para nada. Ni el agua ni el aire. Lo que contagia del virus es que se traslada en las gotitas de saliva, y por eso pedimos el tema de la distancia. Pero no el agua ni el aire, ni en la medida que la gente tenga una distancia de 2 metros. Pero no hay en ese sentido un riesgo.