El exgolfista cordobés Ángel "Pato" Cabrera recibió este lunes una segunda condena por un caso de violencia de género a raíz de una denuncia que le hizo una expareja y continuará en prisión.

El ganador en 2007 del Abierto de Golf de los Estados Unidos y del Masters de Augusta en 2009, ya estaba detenido, luego de haber sido condenado a prisión por otro hecho denunciado por otra expareja.

Ahora Cabrera fue sentenciado a dos años y cuatro meses de prisión en un fallo dictado por la Cámara octava del crimen de Córdoba, tras un juicio abreviado, en el que pudo hablar antes de recibir la sentencia

“Muchos dicen que la cárcel es mala, pero no es así; a mí la cárcel me hizo bien”, dijo el exgolfista, antes de admitir su culpabilidad.

Durante el juicio, según informa el sitio de Cadena 3, el exdeportista de 53 años reconoció la responsabilidad en los hechos y se mostró arrepentido.

La sentencia fue leída por presidente de la cámara, el juez Juan Manuel Ugarte, con la presencia de Cecilia Torres Mana y Micaela Escudero, las exparejas que denunciaron al deportista.

El fiscal de Cámara Hugo Almirón había acordado con los defensores Carlos Hairabedian y Sebastián Becerra una pena reducida de dos años y medio de prisión, pero luego se produjo una rebaja.

En esta ocasión hubo un marco diferente que el juicio anterior, ya que Cabrera tuvo palabras más componedoras, lo que fue reconocido por las denunciantes, indicó el sitio de La Voz.

En ese marco, los abogados querellantes, Carlos Nayi y Federico Pizzicari Bordoy, respectivamente, avalaron la morigeración aún más pronunciada de la condena, por lo que se redujo en dos meses respecto del acuerdo inicial.

Se trató de la segunda condena que recibe Cabrera, ya que el 7 de julio de 2021 recibió la pena de 2 años de prisión efectiva, la cual está cumpliendo en la cárcel de Bouwer.

En esa ocasión, la sentencia fue dictada por la jueza de la Cámara 2ª del Crimen Mónica Traballini, en una causa por "amenazas y lesiones leves" en perjuicio de Torres Mana.

A ese juicio, Cabrera llegó preso tras ser detenido en Brasil, país desde donde fue extraditado, luego de haberse ausentado sin permiso de la Argentina mientras se desarrollaba la causa en 2020.