El jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, anunció este miércoles que la Ciudad de Buenos Aires va disminuir a cuatro meses el tiempo entre la segunda y la tercera dosis de la vacuna contra el COVID.

Sobre la situación sanitaria, Larreta explicó que la Ciudad “tiene promedios de 2.448 con picos de 5.739, como ayer”, y aclaró que la proyección para este miércoles es "aún mayor".

También detalló que la ocupación de camas de terapia ronda el 6%. “Si bien mucha gente se está contagiando, hasta el momento muy poca está atravesando un cuadro grave que requiera internación”, dijo en la conferencia de prensa.

Y continuó: “Es importante que todos nos apliquemos las dosis que corresponden. En la Ciudad, más del 91% de la población ya cuenta con al menos una dosis, el 85% cuenta con su esquema completo y el 18% ya se aplicó la de refuerzo”.

En este sentido, la Ciudad acotará el tiempo que transcurre entre la segunda dosis y la aplicación de la tercera. “Hasta hoy, el intervalo venía siendo de cinco meses. Nuestro objetivo es acelerar la vacunación para llevarlo a cuatro, en la medida en que tengamos provisión de vacunas”, destacó Larreta.

En cuanto a los testeos, el Gobierno porteño sumará este jueves un nuevo centro en Parque Roca que en los próximos días podrá brindar hasta 6 mil turnos diarios, y desde el viernes se incorporarán 4 Unidades Móviles que brindarán apoyo a las Unidades Febriles de Urgencia (UFU´s).

“En la Ciudad tenemos una tasa de testeos diarios de 1 cada 60 habitantes. Una tasa altísima que hace que seamos el distrito del país que más testeos hace por habitante. Es importante que todos los distritos pongamos nuestro mayor esfuerzo en testear más”, agregó.

También reclamó la aprobación del autotest y añadió: “Funcionan en muchos países del mundo y que permiten a las personas comprarlo en una farmacia, hacerlo en su domicilio y tener un resultado en minutos”.