En sus últimas horas de aislamiento, tras un último hisopado negativo, Alberto Fernández volvió a dejar declaraciones con impacto en la esfera política. Consultado por el impuesto a las grandes fortunas, dijo que “queremos empezar un tiempo donde la solidaridad se vuelva la regla, no la excepción. Que no tengamos que sacar una ley para ser solidarios". Además, planteó que “sería grato que en la Argentina los que más tienen, después de una pandemia, destinaran ayuda a los más postergados. Hablaría bien de los empresarios que tienen grandes fortunas y el resto de nosotros estaríamos agradecidos".

Respecto del proyecto de aborto legal enviado al Congreso, se mostró esperanzado en conseguir los votos para que se apruebe en las Cámaras: “Estamos en condiciones de que el proyecto se convierta en Ley”, dijo, y pidió dejar de tratar el tema como un dogma religioso y abordarlo como una problemática sanitaria: “Es un problema de decisiones individuales. Yo soy católico pero tengo que resolver un problema de la salud pública. No tomo como un dogma la posición sobre el aborto". Dijo que hará “todos los esfuerzos para que el Congreso acompañe” y dejó una crítica a la gestión de Mauricio Macri: “Lo que no va a haber es un Presidente llamando gobernadores para que sus senadores voten en contra”.

Respecto de la polémica por la cena con Evo Morales y la comitiva presidencial en Jujuy, dijo que "con Evo iba a ser una cena de cuatro personas. Después se sumaron más personas, hubo un relajamiento muy claro y no está bueno que eso pase. Tiene que haber una alarma que nos recuerde que estamos en riesgo".

En referencia a la vacuna contra el covid-19, a los laboratorios con los que Argentina negocia y a la proyección de las fechas de posible vacunación, planteó que "no estoy macaneando con los tiempos, pero a veces los tiempos de pruebas de las vacunas se van corriendo. Estoy planteando que organicemos los comandos de vacunación. Entre enero y febrero podríamos vacunar a 10 millones de personas. Tenemos capacidad de vacunar a 5 millones de personas por mes. Eso nos permitiría en marzo estar muy tranquilos para lo que podría ser la segunda ola y recibir la vacuna de Oxford"

El Presidente rechazó las críticas de quienes plantean que se está viviendo un fuerte ajuste a partir de la nueva fórmula jubilatoria o el recorte en asistencia social: “A los que hablan de ajuste, les recomiendo que miren el presupuesto. "Lo único que baja son los intereses que había que pagarles a los acreedores. Ahí está el ajuste”. Y concluyó con una frase sobre la disputa política sobre el jefe de los fiscales: dijo que “Carrió no ayuda” y ratificó que "Daniel Rafecas es el mejor candidato a procurador que puede existir".