La ministra de las Mujeres, Géneros y Diversidad de la Nación, Elizabeth Gómez Alcorta, anunció la puesta en marcha de un proceso participativo y federal para construir una reforma integral de la Ley 26.485 de protección integral para prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra las mujeres en los ámbitos en que desarrollen sus relaciones interpersonales.

La propuesta, a once años de la sanción de la ley, tiene por objetivo adecuar la normativa a las necesidades y demandas actuales sobre nuevos tipos y modalidades de violencias, incorporar la perspectiva de diversidad y brindar herramientas para fortalecer el rol de los distintos niveles de gobierno y de las organizaciones sociales territoriales en el abordaje de esta problemática.

“Modificar una ley tan innovadora como lo fue la 26.485, da cuenta de que estamos avanzando, que hay un mayor nivel de conciencia de la problemática que como sociedad estamos enfrentando y que tenemos la potencia para hacernos cargo de transformar la realidad en que vivimos”, afirmó la ministra y enfatizó: “Tenemos la obligación histórica de defender lo conquistado, de honrar la lucha que hemos llevado adelante mujeres y LGBTI+ por nuestra dignidad y nuestros derechos”.

El proyecto final se se presentará el 25 de noviembre del próximo año y se elaborará con foros participativos y federales de todos los sectores y territorios. Las convocatorias se realizarán a través del ministerio en conjunto con la Comisión de Mujeres y Diversidad de la Cámara de Diputados y Diputadas de la Nación y la Comisión de la Banca de la Mujer del Senado de la Nación.

Además, se convocarán encuentros regionales en las sedes de distintas Universidades Nacionales y otros espacios de la comunidad para debatir y compartir miradas acerca de los lineamientos y ejes estratégicos que se proponen, siempre que la situación sanitaria lo permita.

También, se invitará a participar a actores institucionales, comunitarios, organizaciones y público en general a exponer propuestas sobre cada uno de los ejes que se aborden, y se convocará a expertos y expertas de diferentes áreas para debatir en torno a los temas prioritarios que serán planteados en Mesas de Trabajo.

Sobre este punto, Gómez Alcorta remarcó que “no queremos una norma nacida de los escritorios, no porque no pueda ser buena sino porque nunca puede ser tan buena como una norma que salga pensada por todos los sectores”, porque "necesitamos todas las voces. Sin lugar a dudas las interseccionalidades, esta mirada tan estratégica es clave porque si no miramos la violencia en las mujeres blancas de los centros urbanos y estamos dejando afuera al resto”.