En medio del conflicto con el Gobierno de Javier Milei por recortes presupuestarios y sueldos sin actualizar, el Hospital Garrahan volvió a mostrar por qué es un faro en la salud pública pediátrica. Esta vez, el motivo no fue una protesta, sino una intervención quirúrgica sin precedentes: el Garrahan se convirtió en el primer hospital pediátrico público del país en realizar una cirugía fetal dentro del útero materno.

La protagonista de este hecho histórico fue una bebé diagnosticada con mielomeningocele, una grave malformación congénita que afecta la médula espinal. "La intervención intrauterina fue el 9 de abril, en la semana 27 de gestación, como parte del Programa de Diagnóstico y Tratamiento Fetal", detalló el parte oficial. En esa operación participaron 25 profesionales de distintas áreas médicas especializadas en cirugía prenatal.

El procedimiento implicó extraer el útero fuera del cuerpo de la madre para reparar, con precisión extrema, la lesión en la espalda del feto. El equipo trabajó junto a expertos de Curitiba, Brasil, con amplia experiencia en este tipo de casos. "Fue una cirugía de altísima complejidad. La realizamos para mejorar el pronóstico y la calidad de vida de la nena", señalaron desde el hospital.

X de Hospital Garrahan

Aunque la cesárea estaba pautada para el 17 de junio, el parto se adelantó cuando la madre rompió bolsa durante el fin de semana. El equipo médico del Garrahan actuó con rapidez para evitar el traslado y concretó el nacimiento en el mismo hospital, garantizando la atención integral y la permanencia de la bebé junto a su madre desde el primer minuto.

“Haber hecho la cirugía intrauterina y la cesárea en el mismo lugar es un paso enorme en la atención humanizada. Esta bebé será acompañada por un equipo interdisciplinario hasta los 18 años”, remarcó Patricia Bellani, jefa de Neonatología del hospital y responsable de ambas intervenciones. Según explicó, el procedimiento no sólo mejora la movilidad de las piernas, sino que disminuye otras secuelas como la hidrocefalia y favorece el desarrollo cognitivo. "La cirugía salió perfecta, con una cicatriz perfecta", celebró.

Aunque este tipo de operaciones se realizan en Argentina desde 2015, hasta ahora solo se habían hecho en clínicas privadas o en hospitales públicos con equipos externos. El hito del Garrahan marca un antes y un después: demuestra que la salud pública, incluso golpeada por la crisis, puede llegar a niveles de excelencia médica.

Este logro se da en un contexto de reclamos salariales sostenidos por parte del personal del Garrahan. El próximo miércoles 18 de junio, los trabajadores harán un nuevo abrazo al hospital, exigiendo la recomposición de haberes y denunciando el vaciamiento del sistema.