El obispo de San Isidro señaló “las tentaciones que tenemos los argentinos en este momento” y reflexionó sobre “la tentación tremenda de autodestruirnos, y de boicotearnos aquello que nos puede hacer bien”. La iglesia hizo referencia al escándalo desatado este viernes por la aparición de vacunados en el ministerio de Salud que provocó la renuncia de Gines González García.

“Ahora vivimos perplejos por la politización de la vacuna. La vacuna, que como el Santo Padre nos ha dicho repetidas veces, debe tener un alcance universal, nadie debe quedarse sin ella, y primero merecen recibirla aquellos que tienen la responsabilidad de los cuidados esenciales”, dijo el referente de la conferencia episcopal.

El representante de la iglesia católica apuntó que “con esto tenemos que tener una gran delicadeza porque se trata de la vida y la muerte. Cuando nosotros estamos frente a la posibilidad de sostenernos en la vida, eso no se puede politizar. La vacuna es para bien de todos”, dijo.

El obispo de San Isidro es un hombre cercano al papa Francisco, para finalizar su mensaje pidió a los argentinos rezar para  “no ceder ante la tentación y la ruptura de la división”. “Hay que cortar nuestra relación con la naturaleza dentro de nosotros mismos y con los hermanos y hermanas”, sentenció.

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