La lluvia arrasó con todo: hay evacuados, calles convertidas en ríos y ciudades bajo alerta roja
El Gobierno bonaerense activó operativos de emergencia por las inundaciones que afectaron a más de 20 municipios. Ya hay 4,000 evacuados, rutas nacionales colapsadas y pueblos enteros anegados. Zárate, Campana y San Antonio de Areco son algunos de los más golpeados.
El diluvio no dio tregua. Más de 20 distritos de la provincia de Buenos Aires sufren las consecuencias del brutal temporal que arrancó este viernes y que, con más de 400 milímetros de agua caída en 24 horas, transformó a varias ciudades en verdaderos pantanos. Mientras Zárate, Campana y San Antonio de Areco aparecen como las zonas más afectadas, el Gobierno provincial activó una red de evacuación urgente y montó operativos de contención en los municipios golpeados por la tormenta.
Las imágenes que circulan en redes sociales no dejan lugar a dudas: calles convertidas en ríos, vecinos desplazándose en gomones, kayaks o a caballo, casas tapadas hasta la mitad por el agua y autos flotando como si fueran restos de naufragios. En Campana, se habilitaron tres centros de evacuación que ya albergan a 1200 personas, principalmente de los barrios San Cayetano, Santa Lucía y 21 de Septiembre, los más castigados por el agua. En Zárate, también en situación crítica, se declaró la alerta roja y se suspendieron todas las actividades públicas.
En San Antonio de Areco, el nivel del agua llegó al punto de obligar al propio intendente Francisco Ratto a abandonar su casa tras quedar bajo un metro de agua. “El pueblo recibió 400 mm en un solo día. No hay registro de algo así en la historia reciente”, reconoció el jefe comunal. El desborde del río obligó a evacuar a al menos 32 personas, que fueron alojadas en el Gimnasio Municipal. En Exaltación de la Cruz, se asistió a 25 vecinos que también debieron ser trasladados.
La ruta tampoco fue refugio: las vías de escape están colapsadas. En la Ruta Nacional 8, hubo cortes parciales a la altura de los kilómetros 147 y 164. Pero lo más grave se vivió en la Ruta Nacional 9, donde se interrumpió completamente el tránsito en varios tramos, incluyendo el kilómetro 84 (sentido a Rosario), y entre los kilómetros 109 y 120, en ambos sentidos. En el kilómetro 231, también hacia San Nicolás, el paso quedó completamente inhabilitado. “Solicitamos encarecidamente a los conductores evitar la circulación por estas rutas hasta que las condiciones mejoren”, pidió Vialidad Nacional en un comunicado.
En medio de esta situación crítica, el gobernador Axel Kicillof encabezó una reunión de emergencia en el Centro Operativo Puente 12, en La Matanza, junto a su ministro de Seguridad, Javier Alonso, y representantes de Defensa Civil, municipios y organismos nacionales. “Todas las áreas de nuestro gobierno están en el territorio desde que empezó la tormenta. Hablé con la ministra Bullrich para coordinar acciones y llegar a cada lugar afectado”, dijo el mandatario provincial, quien también pidió extremar la precaución porque “podrían seguir las lluvias y viene un frente frío con vientos fuertes”.
El intendente de Campana, Sebastián Abella, alertó sobre la magnitud del desastre: “El arroyo de La Cruz, que normalmente tiene 15 metros de ancho, ahora tiene un kilómetro. Todo eso desbordó hacia la Panamericana. Es muy complejo lo que está pasando”. En total, según estimaciones oficiales, ya son más de 4000 los evacuados, y tres personas siguen desaparecidas, entre ellas un hombre que fue visto por última vez en la Ruta 41, en cercanías de Baradero.
Mientras tanto, Defensa Civil Nacional y el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) mantienen las advertencias vigentes, aunque informaron que el núcleo más intenso del temporal ya se desplazó hacia Entre Ríos. Para este domingo 18 de mayo, se espera una mejora de las condiciones climáticas, con cielo algo nublado y temperaturas de entre 13 y 18 grados en el AMBA y las zonas afectadas. Pero el alerta y la atención siguen intactos. Las autoridades recomiendan no circular por las zonas afectadas hasta nuevo aviso.