Tras la audiencia realizada por la Sala I de la Cámara de Apelaciones en lo Criminal y Correccional, los jueces Pablo Lucero, Magdalena Laiño y Jorge Rimoldi, ordenaron la detención de Irineo Garzón, el comerciante de Once imputado por presunto abuso de una mujer venezolana de 18 años.

La decisión llegó un día después tras un informe de la Oficina de Violencia Doméstica (OVD) de la Corte Suprema de Justicia, que determinó el hecho como una "situación de altísimo riesgo psicofísico y emocional" para la víctima.

A su vez, se encontró en el imputado "rasgos perversos y una modalidad de acecho" y que la chica sufrió "conductas no correspondidas ni deseadas".

También entre las conclusiones resaltan la "existencia de una clara violencia simbólica y sexual" por parte del imputado, quien tomó "como un objeto" a la joven, "abusando de su dignidad y humillándola en su actuación".

Asimismo, el Juzgado N°8 había ordenado hoy la colocación a Garzón Martínez de un dispositivo de geo posicionamiento dual (tobillera) para controlar la restricción y el acercamiento hacia la chica.

Ante esta situación, el imputado será detenido y tendrá que afrontar el resto de la investigación y el proceso en prisión.