Detrás de las buenas noticias suele haber un sinfín de situaciones no observables a simple vista, pero que son trascendentales a la hora de comprender cómo se construyen respuestas inéditas a situaciones inéditas. El Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas de Argentina (CONICET) participa activamente del megaoperativo que diseña la Argentina para vacunar a millones de personas. A la espera de una aprobación de ANMAT para aplicar el antídoto de Pfizer-Biontech en la Argentina, la máxima autoridad de la institución cuenta cómo se trabaja en dos ejes clave: la refrigeración y la identificación. Además, detalles sobre el transporte, el almacenamiento en hielo seco y el “censo de freezers -80°” en todo el territorio nacional.

Data Clave: La vacuna de Pfizer fue aprobada para su utilización en Reino Unido y pide autorización a ANMAT para su aplicación en la Argentina. ¿Cuánto podría demorar la aprobación en el país?

Ana María Franchi: Es muy probable que se apruebe acá porque las restricciones que pide el Reino Unido son muy exhaustivas. Estarán al nivel de ANMAT, asique es muy probable. Yo calculo que la aprobación la pueden sacar en una semana, diez días. Técnicamente puede empezarse a vacunar: una vez que ANMAT apruebe.

DC: ¿Cuáles son los riesgos de que todo se esté haciendo en tiempo récord?

AMF: Hay una fase 3 muy exhaustiva. En el caso específico de la vacuna de Pfizer vacunaron a 43 mil personas. Prácticamente no tuvieron ningún caso de riesgo y de todos los que recibieron la vacuna creo que solo 7 u 8 fueron contagiados, asique vamos muy bien. Por supuesto, ahora hay que cuidar todo el operativo que se está preparando: es algo inédito al igual que esta pandemia. Vacunar -en principio- a casi 8 millones de personas en un par de meses y a lo largo y a lo ancho del país es un tema. Pero creo que los riesgos son menores tras haberse cumplido la fase 3 exhaustivamente con una cantidad muy importante de individuos involucrados.

DC: ¿Cómo trabajará el CONICET en la etapa de vacunación?

AMF: El CONICET en primer lugar lo que está poniendo a disposición de todo el operativo es esta cadena de frío que no es tan común. En general los freezers -80° los tienen los bancos de sangre, los bancos genéticos, los institutos del CONICET. Entonces ya hemos hecho y seguimos actualizando un censo de los freezers: dónde están, capacidades, el tiempo que pueden ser ocupados. Esa es nuestra primera colaboración. Por otro lado estamos viendo cómo colaborar en el sistema de identificación de las personas que van a ser vacunadas. La identificación en lugar geográfico, etc. Estamos a disposición para cualquier llamado del ministerio de Salud o el Poder Ejecutivo.

DC: ¿Argentina tiene las condiciones para la logística que requiere la vacuna de Pfizer?

AMF: Las condiciones logísticas se están armando. Por un lado, la identificación y la compra de estos freezers de -80°. De hecho ya se ha contactado a uno de los fabricantes en la Argentina de estos freezers. La logística se está armando con una ayuda de distintas instituciones: las Fuerzas Armadas, todo el ministerio de Salud y otras. Es algo no imaginable que se empieza a armar a tiempo récord.

DC: ¿Se puede refrigerar con hielo seco? ¿En qué casos y por cuántos días?

AMF: Se puede transportar y mantener un tiempo en hielo seco. Ya de por sí se está haciendo en algunos países la búsqueda de hielo seco. Dicen que entre Estados Unidos y Canadá necesitan como el 5% de todo el hielo seco global. El otro tema es que el transporte por aviones con hielo seco tienen un límite. En algunos países están viendo cómo esto se puede ampliar con algunas compañías aéreas. Lo que dice Pfizer es que la vacuna puede estar con requerimientos menores durante unos pocos días, entre cuatro y cinco.

DC: ¿Cuál cree que es el mayor desafío de la etapa de vacunación en la Argentina?

AMF: Creo que uno de los desafíos es el transporte y mantenimiento de las vacunas. En el caso de Pfizer, exige un frío inusual de -80°. Las otras tienen menos requerimientos. Hay algunas que tienen un requerimiento de freezer de -20° que es el freezer que uno puede tener en su casa y que están ampliamente distribuidos en todo el país. El otro es la identificación de dónde hay que vacunar: una cosa es ir a un geriátrico a vacunar, donde todas las personas están en un mismo lugar, y otra es la identificación o encontrar a las personas en los distintos lugares. Probablemente eso se haga con el padrón electoral. Y asegurarse de que toda la población de riesgo esté vacunada. Creo que son varios los desafíos. Pero mostramos que estuvimos capacitados para enfrentar la pandemia, que se actualizó el sistema de salud para responder. No tuvimos que elegir a quién le poníamos un respirador, gracias a la primera etapa de aislamiento. Creo que también vamos a estar preparados para esto.