Roly Serrano tiene una larga trayectoria en la actuación pero también en la superación de adversidades. Luego de un año en el que la humanidad se topó con un rival invisible y agresivo que revirtió los esquemas del mundo Serrano elige creer que, como a lo largo de la historia, el proceso lógico después de la tragedia será el aprendizaje y el crecimiento. Sin embargo, es crítico de quienes tienen casi por costumbre no colaborar en la construcción del debate público. Inquebrantable, a sus 65 años, Roly cuenta que sigue en la búsqueda permanente de nuevos desafíos.

LA ENTREVISTA COMPLETA

Data Clave: ¿Cómo ves a la Argentina en general? ¿Qué ves cuando prendés el televisor o salís a la calle?

Roly Serrano: Creo que los argentinos somos una raza muy especial, desobedientes por naturaleza. Pero veo que en este momento tan difícil que estamos viviendo hay un comportamiento muy, muy, muy solidario en general. Por la cantidad extraordinaria de gente que se cuida. Hay quienes no, hay gente que está en contra pero hay veces que siento que es un deporte estar en contra. Porque estar en contra del cuidado en este momento me parece una falla humana muy importante.

DC: ¿Creés que en la discusión pública se está acertando en los temas trascendentales para que el país pueda avanzar?

RS: A veces es difícil entender la discusión pública porque somos tan opinadores en general, opinamos de todo lo que creemos que sabemos y en realidad no sabemos. Porque también creo que recibimos tanta información que nos saturamos la cabeza y no sabemos a veces de qué se trata en general o no somos objetivos en esa opinión. Eso es lo que nos impide avanzar en muchas cosas. Yo siento que a veces sucede eso. No podemos avanzar porque no podemos ser capaces de relajarnos y poder profundizar en las cosas. Damos por hecho lo que los opinadores seriales de la televisión nos dan.

DC: Sin entrar en partidismos, ¿creés que las autoridades suelen estar a la altura de las circunstancias a la hora de resolver los conflictos más trascendentales?

RS: Más allá de todo partidismo creo que sí. Que las autoridades en general han actuado bien y están actuando bien. Lo que más me interesa de todo esto es que en muchos casos y en general desapareció el partidismo. Existen algunos francotiradores pero ya sabemos quiénes son, pero en general muchos más allá de pensar distinto se unen porque el enemigo es uno solo. Hay un enemigo en común, todo va en contra de ese enemigo que es el virus.

DC: ¿Cómo viviste este año tan singular para la humanidad? ¿Creés que surgieron nuevas oportunidades, formatos e ideas a partir de la cuarentena y el aislamiento?

RS: Siempre después de las grandes crisis uno aprende cosas y tiene que aprender porque es un proceso lógico del ser humano. El ser humano siempre ha sido así, después de las revoluciones siempre algo ha pasado. Después de las grandes tragedias siempre se aprendió algo y se creció a partir de eso. Esto que estamos viviendo nos está enseñando un montón de cosas. A valorar determinadas cosas que antes no valorábamos. A parar un poco la pelota, a pensar un poco en el otro y no en uno mismo. Eso creo que va a ser lo bueno dentro de todo lo malo.

DC: ¿Existe el desafío para los artistas en general y de la actuación en particular de reinventarse en la “nueva normalidad”?

RS: Siempre los artistas hemos tenido esa particularidad de solucionar y pasar por encima los problemas. Es como reinventarse constantemente. Eso es la característica y la esencia de un artista. Es como el ave fénix. Cuando uno cree que ya no está más resurge, vuelve.

DC: Son muchos los que perdieron durante este año. ¿Creés que hubo personas que le encontraron la vuelta y pudieron salir triunfantes?

RS: Estaría bueno hacer un análisis de eso de que perdimos un año. A veces pienso que muchas veces sin darnos cuenta perdemos el año. Porque no fuimos capaces de utilizar ese año para algo fructífero para crecer, para mejorarse, para mejorarte a vos, para ayudar a mejorar la sociedad. Pero no lo contabilizamos como un año perdido. Simplemente decimos “bueno, ya está, ya está, ya fue el año, vamos a ver qué podemos hacer el año que viene”. Y a veces ese año que viene también pasa lo mismo. Te olvidás de todo y lo único que querés es transitarlo, buscando algo que no sabemos qué es.

DC: ¿Cómo es un día “normal” en la vida de Roly Serrano?

RS: Un día normal de Roly Serrano es como cualquier día de cualquier persona, con sus necesidades, con una búsqueda constante, con ver qué puedo hacer, cómo puedo compatibilizar el tiempo. El cuidarme, estar preocupado por no contagiarme o no contagiar a otros. Si es que estoy contagiado y no lo sé. Es así, normalmente es así. Y ahora, preparando algunos trabajos para el futuro y preparándome para eso.