Una investigación realizada por la Universidad Siglo 21 analizó los hábitos de consumo de los argentinos. El trabajo reveló que solamente un 15% de la población consume carnes todos los días y que cuatro de cada 10 personas consume verduras de manera cotidiana.

La encuesta se hizo durante la pandemia en siete ciudades del país, con el objetivo de analizar los efectos que se manifiestan en los hábitos y en la salud de los ciudadanos.  

Otro dato muy relevante es que solo un tercio de los consultados afirmó que consume frutas, leche o yogur de manera diaria. La ingesta es más frecuente en mujeres, al igual que ocurre con las verduras.

Según lo informado a partir del relevamiento, queda en evidencia que la alimentación de la población dista de ser nutritiva y variada, con una alta presencia de harinas y panificados en la dieta actual. “Esta es una tendencia a nivel mundial, que da como resultado problemas de malnutrición, obesidad, un aumento de la diabetes, entre otros”, destacó Natalia Cervilla, Directora de la Licenciatura en Nutrición de Universidad Siglo 21.

Sin embargo, la mayoría de los individuos (9 de 10) dijo estar “satisfechocon su estado de salud actual, calificándola como “buena o muy buena”, pero las personas de mayor edad perciben su estado como “menos favorable”.

Mientras que siete de cada 10 personas se siente igual que antes de la pandemia, el resto de los encuestados se divide de manera equitativa entre quienes se sienten peor y mejor que antes de la pandemia. “Las personas de mayor edad muestran una diferencia, ya que creen estar peor que el año pasado, duplicando al mismo segmento de las edades más jóvenes”, informaron los autores de la investigación.

En cuanto a la hidratación, que es fundamental para llevar una vida saludable, una amplia mayoría de personas afirman consumir agua, soda o infusiones de manera cotidiana, aunque cuatro de 10 participantes no llega a la cantidad recomendada por la OMS (dos litros por día). Además, uno de cada 10 toma gaseosas al menos varios días de la semana, ya sea con o sin azúcar. El consumo de agua o soda es más frecuente entre las mujeres y, geográficamente, en Córdoba, San Miguel de Tucumán y Corrientes.

“Como lo indican las organizaciones y referentes a nivel mundial, la falta de una dieta balanceada en cantidad y calidad, y el sedentarismo, están entre los principales factores de riesgo para el desarrollo de enfermedades no transmisibles. No es posible definir una única dieta como saludable, ya que se debe adecuar a las características de cada individuo, sus gustos, preferencias y cultura alimentaria. En todos los casos debería incorporar alimentos de todos los grupos y colores (frutas y verduras, legumbres y cereales, preferentemente integrales, carnes y huevos, lácteos preferentemente descremados, aceite, frutos secos y semillas), y limitar aquellos alimentos de alta densidad energética y bajo valor”, agregó Cervilla.