Un hombre alcoholizado se incrustó esta madrugada con su automóvil en el frente de un kiosco del barrio porteño de Almagro, sin que de milagro se registraran víctimas.

El hecho se registró aproximadamente a las 2.30 en la esquina de las avenidas Castro Barros y Belgrano donde el conductor de un Peugeot 307 perdió el control del rodado y se metió de lleno dentro de un kiosco.

En el interior, estaba un empleado que resultó ileso y un ocasional cliente se apartó de la puerta justo cuando vio que se venía el automóvil, según quedó registrado en las cámaras de la vía pública.

El automovilista de 41 años, que también resultó ileso, fue sometido al test de alcoholemia que arrojó un resultado de 2,20 gramos de alcohol por litro en sangre, más de cuatro veces sobre lo permitido para un conductor particular, que es 0,50 gr/l.

En el operativo intervino personal de la Comisaría Vecinal 5 B y del Gabinete Científico la Unidad Área I Este de la Policía de la Ciudad, según se informó.

La Unidad de Flagrancia Oeste de la Fiscalía General de Ciudad, a cargo de Inés González, ordenó el secuestro del auto y de la licencia de conducir del imputado a partir del resultado del test de alcoholemia.