Un nene de 10 años, que había sido brutalmente golpeado por su madre en la cabeza, logró pedir ayuda a una almacenara, que tiene su negocio ubicado a pocos metros de su casa en la ciudad de Río Tercero, Córdoba.

“Me dijo que la mamá lo había golpeado con un palo”, contó la comerciante que lo rescató, Valeria Martínez, en diálogo con el canal El Doce.

La mujer relató que apenas vio entrar al chico al local salió de atrás del mostrador para auxiliarlo. “Entró llorando, diciendo que le dolía mucho la cabeza, y no se dejaba tocar”, detalló. Y al ratito llegó la madre del niño al local, pero la mujer ya había dado aviso a la policía.

Según se determinó el nene de 10 años sufrió una fractura en la base del cráneo y una hemorragia intracraneal y se encuentra internado en una sala común del Hospital de Niños de Córdoba, mientras que la mujer fue detenida e imputada por el delito de "lesiones graves calificadas por el vínculo".

El hecho ocurrió alrededor de las 21:30 del lunes en la calle Artigas al 100 cuando el menor concurrió a una despensa, le pidió a la mujer que atendía en el lugar que lo ayudara y ella, al ver al pequeño con golpes, le preguntó qué le había ocurrido, tras lo cual el niño le contó que su madre lo había golpeado.

Ante esta situación, la comerciante dio aviso a las autoridades policiales, quienes llegaron al lugar para asistir al pequeño, quien fue trasladado al Hospital Provincial de Río Tercero, desde donde luego se dispuso que sea llevado al centro de salud de la capital provincial.

En tanto, luego de que el niño fue llevado al hospital local, su madre concurrió a verlo y fue detenida por orden de la fiscal Paula Bruera, quien la imputó por el delito de "lesiones graves calificadas por el vínculo".

La detenida permanece alojada en la Alcaldía de la Departamental Tercero Arriba, mientras que se investiga la posible comisión de otros hechos de similares características en perjuicio de otros menores de edad.

De acuerdo a lo informado por las autoridades, la mujer no tenía ninguna denuncia anterior por violencia, aunque sus otros dos hijos, de 1 y 5 años, se encontraban con su abuela materna y, según trascendió, ambos fueron sometidos a una revisión médica.

En declaraciones a la FM Sol, la vicedirectora del Hospital de Niños, Verónica Petri, señaló que, pese a las heridas, el menor se encuentra estabilizado, en observación y en sala común, “sin ninguna complejidad”.