Alemania, en plena crisis sanitaria: más de 50.000 casos diarios, límite de ocupación de camas y rechazo a las vacunas
El país europeo, con casi dos años de covid-19, sigue sin poder aplacar los estragos de la pandemia. Uno de cada cuatro alemanes no quiere vacunarse en un territorio donde sobran las vacunas. También se da en un contexto en el que concluye el mandato de Ángela Merkel y todavía debe formarse la nueva coalición de Gobierno.
El Ministerio de Salud de Alemania confirmó este jueves que por primera vez, tras dos años de pandemia, el país tiene más de 50.000 casos diarios, superando una nueva máxima y con picos de ocupación de camas por terapia intensiva.
El Instituto Robert Koch, uno de los responsables de informar la situación sanitaria, señaló que en las últimas 24 horas se han registrado 50.196 contagios y 235 muertos, lo que eleva los totales a 4.894.250 y 97.198, respectivamente.
La cifra de positivos supone un drástico repunte respecto a los 39.676 notificados el miércoles, que supusieron la primera vez que el país rozaba el umbral de los 40.000 contagios. Además, supone más del doble de los datos registrados la semana pasada.
Asimismo, el organismo señaló que la incidencia acumulada semanal asciende a 249,1 casos cada 100.000 habitantes, lo que supone un cuarto día consecutivo en datos récord. La cifra superó el lunes por primera vez la barrera de los 200 casos cada 100.000 habitantes.
El problema principal que tiene Alemania es el “vacío de poder” por la partida de un Gobierno y la llegada de una coalición que todavía no se terminó de conformar.
Ángela Merkel, luego de años en el poder, se encuentra en sus últimos días al mando alemán y no tiene en mente establecer políticas de largo alcance. Si bien mantiene el poder legal, ya no cuenta con la legitimidad que construyó a través de la ciudadanía.
El dato más complejo para Alemania es que uno de cada cuatro alemanes eligen no vacunarse y ya hay evidencias de la correlación no vacunados – contagiados. Esto trae como consecuencia el colapso de hospitales y la capacidad limitada de la ocupación de camas de terapia intensiva.
Alemania es un país que cuenta con una base de vacunas y que ya está en planes de alcanzar a la población con la tercera dosis. Sin embargo, muchos que ya fueron inoculados no quieren aplicarse otra vacuna. Y de acuerdo a los datos, los efectos de la vacuna, a lo largo del tiempo, ceden.
El país europeo está a la espera de que se forme una coalición de Gobierno que sea capaz de administrar la pos pandemia y aplacar la curva de contagios. Las conversaciones entre los partidos tradicionales iniciaron el 21 de octubre y todavía no parece haber algún tipo de acuerdo político. En la puja de poder están los socialdemócratas, el partido liberal y el partido verde. La misión es lograr un acuerdo en los últimos días de noviembre y presentar al Gobierno el próximo 6 de diciembre. Mientras tanto, la pandemia sigue ganando la pulseada.