Estados Unidos es el primer país en anunciar sanciones contra el sector energético ruso y dio el paso unilateralmente, sin sus aliados europeos.

De este modo, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anunció este martes una prohibición total de las importaciones de petróleo, gas natural y carbón de Rusia como sanción por la invasión lanzada por Vladimir Putin.

En una entrevista televisiva, Biden informó que toma la medida para causar mayor "dolor a la maquinaria de guerra" del Kremlin y detalló que "el petróleo ruso ya no será aceptado en los puertos estadounidenses y el pueblo estadounidense asestará otro poderoso golpe a Putin".

"Los estadounidenses se han manifestado para apoyar al pueblo de Ucrania y han dejado claro que no formaremos parte de la subvención de la guerra de Putin", continuó.

No obstante, el mandatario reconoció que estadounidenses verán un aumento de los precios, pero alegó: “Defender la libertad tendrá un costo”. Desde la administración de Biden afirman que la prohibición "cuenta con un fuerte apoyo bipartidista en el Congreso y en el país".

Por su parte, Reino Unido anunció el martes que el petróleo y los productos derivados del petróleo de Rusia se eliminarán gradualmente a finales de año.

Sin embargo, para el resto de Europa será una decisión compleja, ya que muchos países depende de las importaciones para el 90 % de su gas y el 97 % de sus productos derivados del petróleo.