En el decimonoveno día de la invasión rusa a Ucrania, el secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), António Guterres, consideró que un ataque nuclear que antes "impensable" ahora es un escenario "posible".

“La perspectiva de un conflicto nuclear era impensable, y ahora entra dentro de las posibilidades”, dijo el secretario general a la prensa.

Y continuó: “La guerra muestra que la acción climática y toda la economía del mundo están a merced de la geopolítica. Que se escale la guerra por accidente o a propósito amenaza a toda la humanidad”.

En este sentido, el representante de la ONU también calificó de “escalofriante” que se eleve la “alerta de las fuerzas nucleares rusas”.

“Estos llamamientos a la paz tienen que escucharse, esta tragedia debe acabar. Nunca es demasiado tarde para la diplomacia y el diálogo, es necesario que las hostilidades cesen inmediatamente y que haya unas negociaciones serias basadas en la Carta de las Naciones Unidas”, dijo.

Recientemente, el presidente Vladimir Putin afirmó que los sistemas nucleares del país deberían estar en alerta máxima; mientras que desde Estados Unidos manifestaron que no había ninguna razón para cambiar los actuales niveles de alerta.

A esta situación se suma la preocupación por la situación del personal de la antigua planta nuclear de Chernóbil, donde se han dejado de lado las tareas de mantenimiento y reparación de equipos.

En un comunicado, el regulador nuclear ucraniano le informó de que el personal de la central "ya no realizaba tareas de reparación y mantenimiento de equipos relacionados con la seguridad, en parte debido a su fatiga física y psicológica después de trabajar sin parar durante casi tres semanas".