La crisis política y social en Afganistán suma nuevos capítulos día a día y mantiene en vilo al mundo entero. En horas de la noche de ayer y luego de los atentados en el aeropuerto de Kabul, el gobierno estadounidense contraatacó y envió drones militarizados con objetivos específicos.

Este mediodía, el general estadounidense Hank Taylor informó que luego del ataque confirmaron que abatieron a dos líderes del Estado Islámico. Se trata de un “organizador” y un “operador” del atentado en el aeropuerto de Kabul, apuntaron desde el Pentágono.

“Puedo confirmar, ahora que hemos recibido más información, que dos objetivos importantes de ISIS murieron y otro fue herido”, detalló el integrante de las fuerzas armadas norteamericanas. “Hasta donde sabemos, no hay víctimas civiles”, agregó.

En tanto, Taylor manifestó que "sin especificar ningún plan futuro, diré que continuaremos teniendo la capacidad de defendernos y aprovechar la capacidad en el horizonte para llevar a cabo operaciones antiterroristas según sea necesario".

Por su parte, el portavoz del Pentágono, John Kirby, expresó: "No voy a hablar sobre capacidades específicas que ISIS puede haber perdido en este ataque. Perdieron un planificador y un facilitador. Y tienen uno herido. El hecho de que dos de estos individuos ya no estén caminando sobre la Tierra es algo bueno ".

Cabe recordar que el ataque se produjo un día después de que el presidente Joe Biden prometiera tomar represalias por el ataque terrorista en Kabul. "No perdonaremos. No olvidaremos. Te perseguiremos y te haremos pagar", dijo el presidente en declaraciones desde la Casa Blanca el jueves.

Las operaciones de evacuación de Afganistán continúan. “De hecho, hay alrededor de 1.400 personas en el aeropuerto de Kabul que han sido controladas y registradas para vuelos hoy”, señaló el general Taylor.

En total, alrededor de 111.900 personas han sido evacuadas desde el 14 de agosto, justo antes de la toma del poder por los talibanes en Kabul, según las últimas cifras del gobierno de Estados Unidos.

La Casa Blanca y el Pentágono advirtieron que podría haber un mayor derramamiento de sangre antes del martes, la fecha límite impuesta por el presidente Joe Biden para poner fin al puente aéreo y retirar a las fuerzas estadounidenses. "Los próximos días serán nuestro periodo más peligroso hasta la fecha en la evacuación", declaró la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki.