Otro salvaje tiroteo en los Estados Unidos, esta vez en las calles de Filadelfia, dejaron un saldo de tres personas muertas y 11 heridas que tuvieron que ser hospitalizadas de urgencia, según informó la policía.

El inspector de policía de D.F. Pace, indicó que "14 personas recibieron disparos y fueron trasladadas a hospitales. Tres de esos individuos, dos hombres y una mujer, fueron declarados muertos tras llegar a los hospitales con múltiples heridas de bala".

De acuerdo a los detalles de este nuevo acto violento, el inspector precisó en una conferencia de prensa que se produjeron disparos contra la multitud del centro de la ciudad y que un agente disparó contra un sospechoso. No está claro si el sospechoso fue alcanzado.

"Pueden imaginar que había cientos de individuos disfrutando de South Street, como cada fin de semana, cuando se produjo este tiroteo", indicó, sin mucha más información.

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Además, la policía informó que hubo más de un tirador activo. Las autoridades dicen que no se han realizado detenciones, pero que se han recuperado dos armas. Se desconoce el estado de los heridos por los disparos.

Según el Gun Violence Archive, este año se han producido en Estados Unidos más de 230 tiroteos masivos (aquellos en los que cuatro o más personas resultan heridas o muertas en un solo evento, sin incluir al tirador).

El último hecho conmocionante se produjo en la Escuela Primaria Robb de Uvalde, donde Salvador Rolando Ramos, un joven de 18 años, abrió disparo y provocó la muerte de 21 personas entre alumnos y docentes. También está el caso del supermercado de Buffalo, donde un adolescente racista abrió fuego con una ametralladora y mató a personas de raíces afroamericanas.

Estas tragedias han dado lugar a llamamientos a favor de una legislación más estricta en materia de control de armas, iniciadas por el propio presidente Joe Biden. Sin embargo, con pocas esperanzas de romper las divisiones partidarias en el Congreso.