Si bien la tecnología es una gran aliada en nuestras actividades diarias, cada vez más tenemos que ser conscientes que la tecnología impacta en nuestra forma de consumir energía. Por eso debemos realizar a diario un uso responsable, entendiendo que reduciendo su consumo conseguiremos los mismos resultados que gastando más.

Asimismo, el ahorro de energía es doblemente beneficioso, nos permite ahorrar en la factura de luz y contribuir a la protección del medio ambiente. El camino para lograr un consumo inteligente es aplicando la eficiencia energética a través de un cambio en las conductas tanto individuales como grupales.

Es necesario tomar conciencia del poder que tiene el consumidor inteligente para influenciar sobre las empresas que ofrecen productos y servicios. Este nuevo comprador prioriza el impacto de sus acciones a nivel económico y también a nivel ambiental.

Ante el avance tecnológico, las empresas que enfrentan un recambio de equipamiento informático, tienen la posibilidad de disponer de sus equipos usados en forma económicamente rentable, segura, auditable y sustentable con el medio ambiente.

Además de ahorrar en el consumo energético también podemos contribuir a reducir las emisiones contaminantes, reduciendo el consumo de nuestras computadoras y laptops.

A través de estos 7 Consejos podemos evitar el derroche diario de energía y optimizar el consumo eléctrico:

Apagar toda la iluminación de la PC: en el caso de los dispositivos gaming, los accesorios tienen iluminación RGB o de otro tipo, resultando en un consumo considerable al estar encendida sin uso.

Deshabilitar el salvapantallas: Generalmente se tiende a creer, erróneamente, que el salvapantallas ahorra energía. Algunos de ellos que poseen capacidades gráficas muy intensas deben utilizar el doble de energía y evitan que la PC entre en modo suspensión.

Apagar el monitor: En la mayoría de los casos no apagamos el monitor cuando no estamos usando la PC y dejamos que entre en reposo, estado que aún consume energía. Lo más conveniente es dejar el monitor completamente apagado. Actualmente, la mayoría de los modelos del mercado tienen la posibilidad de configurar el monitor para ingresar al modo “ahorro de energía” luego de 20 minutos de inactividad. Asimismo, ajustar el brillo del monitor, consumirá menos energía, a la vez que ayudará a reducir el cansancio visual

Apagar la PC: Si se utiliza la computadora durante todo el día, pero con pequeñas interrupciones que no durarán más de dos horas, lo ideal es no apagarla y dejarla en estado de suspensión.

Desconectar los dispositivos que no estén en uso: Desenchufarlos cuando ya no se utilizan significa un ahorro en la factura de la luz, a la vez que se cuida el planeta. Los dispositivos que permanecen enchufados aunque no los usemos continúan consumiendo energía. Ese desgaste energético desprende toneladas de emisiones de CO2 por año.

Desconectar los cargadores: Se debe desconectar el cargador de la notebook una vez finalizada la carga. Si no lo hacemos, continuará gastando la misma energía que cuando cargamos el dispositivo y generará una cantidad de dióxido de carbono al año que podemos evitar.

Comprar productos que no perjudiquen el medio ambiente: Al adquirir una PC tenemos que buscar equipos que sean energéticamente eficientes, como los Energy Star, que se apagan a un modo inactivo, consumen 15 watts, menos que el consumo de electricidad que una PC sin implementar administración de la energía.