¿Cholulos o estrategas? Libertarios discuten si habrá lugar en las listas para sus mediáticos
LLA sigue creciendo: giras por el país por parte de Karina y más presencia en las redes. En el medio, figuras del espectáculo que se acercan y otras que apoyaron desde siempre.
La política y el espectáculo suelen cruzar caminos en Argentina, pero en los últimos tiempos La Libertad Avanza encontró en los famosos un aliado estratégico. La última incorporación a este peculiar equipo sería Walter “Alfa” Santiago, el ex participante de Gran Hermano, quien confirmó su intención de ser candidato en las próximas elecciones legislativas por el espacio liderado por Javier Milei.
“Yo me quiero involucrar en un cambio de país, en un proyecto de país nuevo donde se termine el país del bombo, del sindicato, de la dádiva, del plan”, declaró Alfa
Sin embargo, el exGran Hermano no es el único que se sumó al equipo libertario. Daniel Mollo, conocido relator deportivo, y Luis Tagliapietra, padre de uno de los tripulantes del ARA San Juan, también asistieron al acto. Ambos manifestaron su apoyo a las políticas del oficialismo. Mollo, quien anteriormente había hecho campaña por Boca Juniors, resaltó que su vínculo con el liberalismo surgió tras numerosas entrevistas y contactos con el círculo de Milei.
La estrategia del espacio libertario se trata de integrar figuras mediáticas para reforzar su presencia y conquistar votantes, especialmente en la Provincia de Buenos Aires, un bastión tradicional del peronismo.
No es la primera vez que La Libertad Avanza coquetea con el mundo de la farándula. En el pasado, nombres como Marcelo Mazzarello y el cantante El Dipy también mostraron afinidad con el espacio liberal. Esta convergencia con personalidades de alto perfil parece formar parte de una estrategia para atraer a nuevos sectores de la población, especialmente a los más jóvenes, quienes ven en estas figuras un reflejo de cambio y frescura.
Los artistas que se alinean con las Fuerzas del Cielo
Desde el rock hasta la televisión, los artistas que apoyan, directa o indirectamente, al mandatario conforman un grupo tan heterogéneo como polémico.
Andrés Calamaro, entre el rock y la política: El reconocido músico argentino sorprendió a sus seguidores al definirse como “ácrata de derechas” y expresar su simpatía por las políticas de libre mercado promovidas por Milei. Desde su cuenta de redes sociales, Calamaro afirmó que "es necesario ser gentil con los líderes de la República" y destacó que no pertenece al espectro "gorila". Sin embargo, también marcó distancias conceptuales, aclarando que en Estados Unidos el término "liberal" se asocia con progresismo, mientras que él defiende una economía de mercado funcional en el contexto argentino.
El Dipy, de la música al bastión libertario: El cantante de cumbia, que incursionó en la política como candidato en La Matanza, se ha convertido en uno de los más fervientes defensores del modelo libertario. Aunque no logró ganar en las elecciones, El Dipy celebró el impacto de Milei en el electorado: "La gente se despertó y sabe que esto puede cambiar".
Francella, Brandoni y las luces de la ficción: Guillermo Francella, en la presentación de la serie El Encargado, vinculó su personaje con los contrastes de las medidas gubernamentales, describiéndolas como "cirugía mayor". En sintonía, Luis Brandoni expresó su deseo de que al país le vaya bien bajo esta nueva gestión, aunque aclaró que no votó a Milei.
Susana Giménez y el "genio de las matemáticas": La conductora Susana Giménez no ocultó su fascinación por Milei, a quien calificó como un genio en números tras entrevistarlo. Su respaldo, expresado tanto en pantalla como en redes sociales, la coloca como una de las figuras mediáticas más destacadas en la lista de seguidores del mandatario.
Otros nombres como Patricia Sosa, Emilia Mernes y Alfredo Casero completan un mosaico variopinto de posturas. Mientras Sosa tuvo desencantos relacionados con políticas culturales que afectaron sus ingresos por derechos de autor, Mernes optó por el silencio ante preguntas políticas, dejando implícita su inclinación. Por su parte, Casero, uno de los primeros en respaldar a Milei, se tornó crítico al percibir inconsistencias en las designaciones del gobierno.
El abanico de figuras públicas que han tomado partido, ya sea por declaraciones directas o actitudes sugerentes, refleja el impacto del discurso libertario en sectores culturales y mediáticos. El debate sobre su rol como referentes sociales y la relación entre política y arte sigue abierto, alimentando una polarización que trasciende los escenarios.