gDías atrás se desató un conflicto diplomático sin precedentes entre Argentina y Ecuador, a raíz de la fuga de una exfuncionaria del entonces Presidente Rafael Correa, que había pedido asilo político en el país. Se trata de la arquitecta María de los Ángeles Duarte Pesantes, exministra de Correa y madre de un hijo argentino de 12 años, solicitara el asilo político de la Argentina, que se lo otorgó pero que no pudo completar las gestiones luego de que el gobierno de Guillermo Lasso se negara a facilitar el salvoconducto para que la exfuncionaria viajara a Buenos Aires. 

Pero no quedó ahí, el cortocircuito escaló con velocidad inusitada y derivó en la expulsión del embajador argentino en Ecuador, Gabriel Fuks. La respuesta del Ejecutivo que encabeza Fernández no tardó en llegar: devolvieron el gesto y le dieron salida al representante del gobierno ecuatoriano en el país.

“Me apena mucho que Alberto Fernández, Presidente de Argentina, haya puesto por delante su amistad personal e identidad política con Rafael Correa por sobre la relación fraterna entre los pueblos de Argentina y Ecuador”, apuntó en sus redes sociales el mandatario ecuatoriano. Pero además, invitó a la conversación a los referentes opositores Mauricio Macri y Patricia Bullrich.

Este martes a la mañana, Correa recogió el guante y defendió al mandatario argentino: “Lasso: Lo del presidente Fernández se llama INTEGRIDAD. El único que puso por delante su canallada, corrupción y mala fe eres tú, y así destrozaste la relación con un país hermano. NADIE te cree, y cada vez estás más solo a nivel nacional e internacional”. Y cerró de manera lapidaria: “Para tonto no se estudia”.

Tweet de Rafael Correa

Correa se encuentra en Buenos Aires para participar del III Foro Mundial de Derechos Humanos que se realiza toda esta semana y del encuentro del Grupo de Puebla, que se desarrollará hoy en el CCK. El expresidente asistió este lunes al encuentro que Alberto Fernández realizó en el Salón de Pueblos Originarios de Casa Rosada. Allí, disparó a la prensa: "Como expresidente, es una ridiculez del Gobierno ecuatoriano, tratando de ocultar su propia ineptitud. No ha habido ninguna fuga. El estatus a nivel de derechos de María (de los Ángeles) Duarte (Pesantes) era de absoluta legalidad porque había recibido el asilo político de la República Argentina".

Quien también recogió el guante fue el mandatario argentino, quien compartió en sus redes sociales una carta que le envió a su par ecuatoriano. “Presidente Guillermo Lasso, reciba estas palabras con el sincero afecto de siempre. Haga el esfuerzo de no mezclar este incidente producto de la impericia de oficiales del Estado ecuatoriano con el amor que a nuestros pueblos vincula”, expresó desde su cuenta de Twitter.

En la misiva, Fernández señala que “la reacción desmesurada del señor Presidente de expulsar al embajador argentino es lo que verdaderamente lastima el buen vínculo que argentinos y ecuatorianos mantendremos a pesar suyo. La gravedad y la injusticia de esa decisión demuestra que es su exceso lo que verdaderamente lastima la relación de nuestros pueblos”. Y agrega: “Esta situación es fácil de remediar. Solo con que reflexione sobre lo que ha hecho y corrija el error bastará. Además, si es que me lo permite, debería buscar a los responsables de su administración que no tuvieron la debida diligencia para impedir la circulación libre de una persona cuya captura reclamaban. Allí están los responsables. No en Argentina”.

Tweet de Alberto Fernández

Pero la cocina de este enfrentamiento mediático tiene otros condimentos. “Lasso quiere tapar su crisis política peleándose con la Argentina. Es muy poco serio. Echar un embajador es el último eslabón, sino Alberto y Cafiero tendrían que haber echado al embajador de Bolsonaro que insultó al Presidente y a su familia y a nadie se le ocurrió”, confió a Data Clave alguien con acceso a los despachos de la Rosada. Y un dato no menor: hay 15 mil ecuatorianos estudiando y viviendo en Argentina, que ante esta reyerta quedan librados a su suerte.

El caso es que este lunes, con cinco votos a favor y dos abstenciones, el Consejo de Administración de la Legislatura ecuatoriano verificó requisitos y admitió a trámite el pedido de juicio político en contra del presidente Guillermo Lasso. Por este motivo, el mandatario ecuatoriano busca una maniobra distractiva y pone el foco en un “enemigo externo”