Era una mañana calurosa de diciembre de 2017 y los vecinos de la localidad entrerriana de Gualeguaychú se preparaban para celebrar año nuevo. Sin embargo, la noticia de la muerte de un joven sacudió la calma: Fernando Pastorizzo (20) había sido hallado con un tiro en la espalda y otro en el pecho, junto a su moto y dos cascos tirados en el suelo. 

Con el paso de las horas, su pareja, Nahir Galarza declararía como testigo. Luego quedó detenida tras una serie de pruebas en su contra, tales como el arma utilizada y un video en el que se la veía caminando cerca de la escena del crimen. En una segunda declaración reconoció que lo había matado con el arma de su papá policía pero que había sido de manera "accidental". 

Con tan solo 19 años se convirtió en la mujer más joven del país en haber sido condenada a prisión perpetua. La Cámara de Casación Penal de Concordia confirmó la pena tras rechazar el pedido de su defensa para que el hecho se considere “homicidio culposo”.

La edad y la apariencia de Nahir, como también los detalles del caso no coincidían con lo que el imaginario común espera de un criminal, por lo que el hecho trascendió rápidamente la fronteras de la localidad y se convertiría en uno de los casos más resonantes e impactantes de la historia criminalística argentina.

Nahir pasa sus días Unidad Penal N° 6 “Concepción Arenal”, de Paraná, donde está detenida. Todas sus expectativas están puestas en el recurso presentado ante la Corte Suprema de Justicia. En el camino solo tendrá luego la posibilidad de recurrir a una instancia internacional, lo que se podría demorar varios años.

El expediente fue girado esta semana a la Procuración para que dictamine, es decir, emita una opinión fundada no vinculante -puede ser tenida en cuenta o no, de forma total o parcial–para los ministros del máximo tribunal.

La defensa cuestionó la supuesta falta de "inclusión de la perspectiva de género” por parte de los operadores judiciales hacia Nahir. También apuntó contra la forma en la que se llevaron adelante las pericias.

En diálogo con Data Clave, su abogada Raquel Hermida Leyenda explicó que sus expectativas se están cumpliendo, ya que se está "revisando todo el juicio completo” y que en este momento la Procuración está analizando "si se investigó bien".

Sostuvo, en este sentido, que Nahir “no tiene una buena pericial psicológica” y “tiene una pericial psiquiátrica cuando ella se sentía mal”. “Es todo muy horroroso. Hoy tiemblan los que están siendo analizados", dijo en relación a los jueces y fiscales de Gualeguaychú que intervinieron en el juicio.

"Yo pretendo un nuevo juicio, donde sea imputado el padre”, añadió la matriculada, quien presentó en enero último una denuncia contra Marcelo Galarza, padre de la joven, como autor del “homicidio agravado” en perjuicio de Pastorizzo.